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26jun14
Obama quiere dar 500 millones de dólares a los rebeldes sirios
Tras dos años de indecisión, Estados Unidos ha decidido involucrarse de forma masiva en la guerra civil siria, que ya se ha extendido a Irak y a Líbano y amenaza con dinamitar todo Oriente Medio. Barack Obama ha pedido al Congreso de Estados Unidos 500 millones de dólares (367 millones de euros) para la oposición armada al Gobierno de Bashar Asad. El presupuesto incluirá tanto material como el coste del entrenamiento de grupos que combaten tanto al Gobierno sirio como a los extremistas islámicos del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS).
La Casa Blanca ha insistido en que la medida no supone un cambio de su política hacia Siria, que gira en torno a la idea de que ninguna de las partes puede imponerse y de que es necesaria una solución negociada al conflicto. Así pues, ¿cómo justificar esa oleada de dinero? Simplemente, afirmando que "esos fondos ayudarán al pueblo sitio a defenderse, a estabilizar áreas bajo el control de la oposición, a facilitar el abastecimiento de servicios esenciales, llevar a cabo acciones contra las amenazas terroristas y promover las condiciones para un acuerdo negociado" a la guerra.
Hasta ahora, Estados Unidos ha concedido ayuda limitada a los grupos que combaten a Asad y a los fundamentalistas. Washington ha transferido armas procedentes de Libia y también pequeñas cantidades de material militar fabricado en Estados Unidos a esos grupos.
La ayuda, y la fecha en la que ésta ha sido anunciada, demuestra el funambulismo estratégico de EEUU en Oriente Medio. Aunque los grupos que reciban la ayuda sean supuestamente moderados, combaten a Asad, que a su vez apoya al Gobierno iraquí de Nuri al-Maliki, que cuenta con 300 soldados estadounidenses que le asesoran en su lucha contra los integristas del ISIS. Esta semana, aviones sirios han bombardeado posiciones del ISIS en Irak.
La punta del iceberg
Pero los 367 millones de euros a la oposición siria solo son una parte de un plan mucho más amplio de Washington para toda la región. Por un lado, la Casa Blanca ha solicitado al Congreso 1.100 millones de euros (1.500 millones de dólares) en ayuda para los vecinos de Siria-Líbano, Irak, Turquía y Jordnaia-que están sufriendo directamente la guerra civil en ese país. Las ayudas a los rebeldes sirios y a los aliados de EEUU en la región forman parte de un paquete de ayudas de 3.670 millones de euros (5.000 millones de dólares) que Washington quiere hacer llegar a los países de Oriente Medio para hacer frente a la expansión de los grupos extremistas.
Al mismo tiempo, según explica el diario 'The New York Times' citando a fuentes anónimas del Gobierno, el equipo de Obama también ha pedido un presupuesto extra de otros 367 millones de euros (500 millones de dólares) para "hacer frente a contingencias inesperadas", lo que constituye un eufemismo para evitar decir 'Irak'.
Estas partidas forman parte del presupuesto de 50.300 millones de dólares que el Gobierno de Obama quiere que el Congreso apruebe para "operaciones en el extranjero", y que incluye la Guerra de Afganistán, el refuerzo de la seguridad de Europa Central y Oriental debido a la anexión rusa de Crimea, y el empeoramiento de la crisis en Oriente Medio. El hecho de que el Ejecutivo de EEUU haya planteado ahora esa suma es normal en EEUU, un país en el que los Presupuestos se van a aprobando por partes, y no en un solo bloque como, por ejemplo, en España. El año fiscal estadounidense comienza el 1 de octubre.
[Fuente: Por Pablo Pardo, Washington, El Mundo, Madrid, 26jun14]
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