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22ago09
Pese al ultimátum, los diplomáticos argentinos no abandonan Honduras
Les habían dado 72 horas para irse y ahora los amenazan con deportarlos.
Ayer vencieron las 72 horas que el gobierno de facto de Honduras dio a los diplomáticos argentinos para que abandonen el país, en lo que denominaron "estricta reciprocidad" luego de que el Gobierno argentino expulsara a la embajadora hondureña Carmen Eleonora Ortez Williams por expresar apoyo al golpe que derrocó al presidente Manuel Zelaya. Pese a esto, la delegación argentina sigue en Tegucigalpa ya que el gobierno de Cristina Kirchner entiende que no hay plazo que respetar, básicamente porque Argentina sólo tiene relaciones con el gobierno constitucional de Zelaya, el único al que reconoce. Otro dato que desmonta la idea de "estricta reciprocidad" es que en el caso de la diplomática hondureña, aunque se pidió su salida del país el día 13 de agosto, no se puso fecha para ello y, de hecho, la mujer seguía en estos días en Buenos Aires. Y un dato más para apuntar. Como en estos momentos no hay relaciones entre el gobierno argentino y el gobierno de facto en funciones, el ultimátum fue anunciado por las autoridades a través de los medios y no hubo comunicación oficial del plazo para abandonar Honduras.
Algunas agencias informaron ayer que, supuestamente siguiendo instrucciones de la Cancillería, dos diplomáticos argentinos (la totalidad de la delegación, a lo que se suma un empleado administrativo) se habían encerrado en la Embajada para evitar ser detenidos y expulsados. Sin embargo, fuentes argentinas desmintieron esta versión y aseguraron que los diplomáticos se siguen conduciendo de la misma manera que hasta ahora, movilizándose de la residencia oficial a la Embajada. Por su parte, ayer el ex canciller hondureño Mario Fortín, actualmente asesor del gobierno de facto, aseguró por radio que los miembros de la delegación argentina corrían riesgo de ser deportados si no regularizan su estatuto migratorio ya que perdieron sus privilegios diplomáticos. Entre estos se encuentran sus derechos a la inviolabilidad e inmunidad, los pasaportes diplomáticos, el uso de franquicias del Estado y de placas diplomáticas para los vehículos. Fortín dijo a radio América que si los diplomáticos argentinos no dejan el país, "quedan en situación migratoria irregular y están sujetos a ser capturados por la Dirección de Migración y puestos en el exterior por vía de la deportación".
También ayer, en un nuevo capítulo de la compleja secuencia de relaciones internacionales de Honduras luego del golpe del 28 de junio, España comunicó a la OEA (Organización de Estados Americanos) la expulsión del embajador hondureño en Madrid, José Eduardo Martell Mejía, luego de que éste fuera destituido por el derrocado presidente Zelaya. La destitución fue ordenada el 5 de agosto pasado y el día 19 España informó a Martell Mejía que debía abandonar el país. Mientras el gobierno de Micheletti busca mostrar que tiene margen y poder para maniobrar en materia diplomática, el lunes llega a Tegucigalpa la delegación de la OEA que sigue buscando una salida negociada a la crisis. La misión, encabezada por su secretario general, José Manuel Insulza, está integrada por siete cancilleres, entre ellos el ministro argentino Jorge Taiana, quien parte mañana a Miami, donde se encontrará con el resto de la delegación.
[Fuente: Clarin, Bs As, 22ago09]
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