Equipo Nizkor - Casado rompe con Vox y Sánchez recula en el Poder Judicial bajo presión de Merkel y la UE.

La fallida moción de censura de Vox contra el presidente Pedro Sánchez y la brusca ruptura de Pablo Casado con Santiago Abascal empujan el PP hacia el centro de la política y facilitan una posible 'gran coalición' de Gobierno en España entre PSOE y PP. Lo que patrocina, desde la presidencia de la UE, Angela Merkel para que Pedro Sánchez -quien la canciller exigió la retirada de la reforma del Poder Judicial- rompa con Pablo Iglesias. Y para que los populismos de extrema derecha (Vox) y de extrema izquierda (Podemos) salgan de los centros de poder en España.

Algo en lo que probablemente estaría de acuerdo el Papa Francisco al que Sánchez visitó ayer en el Vaticano, donde ven con preocupación el empeño de Podemos de romper las relaciones de España con la Santa Sede, por lo que en Roma verían con buenos ojos la ruptura de Sánchez con Iglesias.

Lo que sin duda patrocinan algunos líderes europeos y, de manera especial, la canciller alemana Ángela Merkel que ha presionado a Casado para que rompa con Vox; y a Sánchez para que retire la reforma de la Ley del Poder Judicial, en pos de su acercamiento al PP, lo que empiezan a cumplir ambos dirigentes españoles. Y lo que puede facilitar el pacto de la 'gran coalición', que sería más fácil para Sánchez si tiene aprobados los PGE de 2021 y al menos dos años de estabilidad por delante.

Sobre todo ahora que rebrota con fuerza la pandemia en España, donde el Gobierno anunciará hoy un nuevo 'estado de alarma', y está empeorando gravemente la situación económica y social española camino de un desastre sin precedentes. Y de un bronco estallido social en las calles y las plazas de España, dirigido contra la clase política sin distinción alguna y en general.

Pablo Iglesias lo sabe, teme que Sánchez se acerque a Casado y por ello acelera las negociaciones de los PGE de 2021 que el martes presentará con Sánchez para acelerar su negociación con ERC, PNV y Bildu, dejando fuera a Arrimadas con la inclusión de una importante subida de los impuestos.

Sin embargo a quien Iglesias no podrá dejar fuera de todo esto es a la UE, cuyo Consejo Europeo preside actualmente Ángels Merkel la que pretende: un amplio marco de estabilidad política y base parlamentaria en España (lo que solo garantiza la 'gran coalición' PSOE-PP); y reformas estructurales de alto calado en nuestro país, a las que también se opone Podemos.

Dos condiciones previas, además de la retirada de la Ley de reforma de la Justicia en España, para que Merkel y la UE empiecen a facilitar los fondos de la UE a España. Los que por cierto no llegarán a nuestro país antes del segundo semestre de 2021, y lo que obligará a Sánchez a pedir el rescate urgente de los Fondos MEDE de la Comisión Europea y ayudas a empresas y al paro para atender las más urgentes necesidades financieras del país.

Cisma en la derecha y un debate trucado

El debate de la moción de censura planteado por Vox contra el presidente Sánchez se convirtió en una moción de censura de Pablo Casado contra su ex amigo Santiago Abascal, con duras maneras y toda clase de improperios y descalificaciones, con los que el líder del PP quiso dejar clara la ruptura definitiva de sus relaciones con la extrema derecha de Vox.

Algo que seguramente le ha aconsejado a Casado Días atrás Merkel y que la canciller -como Macron ha hecho también en Francia- ha implementado en Alemania al imponer un 'cordón sanitario' de su partido contra la extrema derecha de su país, en los ámbitos nacional y regional.

Y eso mismo es lo que acaba de empezar a hacer el PP incluso a riesgo de que caigan los gobiernos autonómicos de Andalucía, Madrid y Murcia cuya frágil estabilidad ahora depende de los apoyos parlamentarios de Cs y Vox en sus respectivas Asambleas regionales.

Un ataque de Casado a Abascal que se había preparado en secreto y solo desveló en el momento en el que el líder del subió a la Tribuna del Congreso y que sí lo había hablado Casado con Aznar, el que ya había anunciado su posición favorable al 'no', frente a la desconcertada Alvarez de Toledo que apostó por la abstención y calificó de error e injusticia el ataque personal de Casado a Abascal.

Pero Casado se cuidó en no desvelar que esa ruptura estaba impulsada por Merkel desde el corazón de la UE, de lo que poco a poco se irá enterando Abascal cuando salga del coma psicológico en el que entró tras la furiosa embestida de Casado contra su persona y contra Vox.

Un ataque virulento de Casado que Abascal no supo responder, tras quedar noqueado en el Congreso y que ahora empezará a comprender a sabiendas que en la UE democrática no hay sitio para partidos extremos como el suyo. El que además, y como hizo Abascal en el debate atacan a la Unión Europea y defienden la Europa de las naciones nacionalistas, que están en el origen de las pasadas guerras en el continente europeo.

El resto del debate careció de importancia y trascendencia y estaba lleno de trucos. Sánchez llevo escritas de antemano todas sus réplicas a Abascal, y algo parecido hizo un Iglesias que pretendió un diálogo amable con Casado al que llamó el nuevo Cánovas calificando de 'brillante' su discurso contra Abascal, sin percatarse en ese momento Iglesias de que el giro al centro del PP favorece la 'gran coalición'.

PSOE y PP dieron instrucciones a sus diputados de no armar bronca con los discursos de Vox (de Garriga y Abascal), Aitor Esteban renunció a debatir, Rufián hizo de 'ftiki' como le dijo Abascal y Vox aprovechó la respuesta a Bildu para leer como golpe de efecto y oportunismo barato la lista de los nombres de todas las víctimas de ETA lo que llevaron preparado desde la sede de Vox.

Abascal salió derrotado y mal parado y no se atreve a romper los pactos con el PP en Madrid, Murcia y Andalucía por temor a perder su electorado en el campo sociológico de la derecha española que ya veremos cómo reacciona ante la ruptura del PP con Vox.

Finalmente el giro al centro del PP a quien amenaza ahora es a Cs salvo que este vuelco facilite un acercamiento entre ambos partidos camino incluso de una no lejana integración pactada entre Casado y Arrimadas, en eras de la pretendida por Aznar reconstrucción del centro derecha español.

25oct20

Casado rompe con Vox y Sánchez recula en el Poder Judicial bajo presión de Merkel y la UE

[Fuente: Por Rafael Halcón, República de las ideas, Madrid, 24oct20]

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