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04sep18
La fiscal pide 11 años de prisión para el doctor Vela en el primer juicio por los bebés robados
La Fiscalía ha mantenido este martes su petición de 11 años de prisión para el doctor Eduardo Vela en el primer juicio de un caso de bebé robado en España. "Es un caso claro de tráfico de niños. Porque cuando coges a un niño, lo apartas de su familia biológica y lo entregas a otra al margen de la legalidad estamos hablando de tráfico de niños", ha sostenido la fiscal en su informe final ante la Audiencia Provincial de Madrid, poco antes de que el juicio quedara visto para sentencia.
La fiscal atribuye al doctor Vela, de 85 años, un delito de detención ilegal por el que reclama ocho años de cárcel, y los delitos de suposición de parto y falsedad en documento oficial, por los que solicita otros tres años y multa. Además, reclama una indemnización de 350.000 para la afectada por los daños morales. La representante del Ministerio Público ha incorporado una nueva petición: que el tribunal active una investigación contra la mujer del médico por falso testimonio, al estimar que ha mentido al tribunal y que sabe tanto lo que sucedió como, probablemente, la identidad real de los padres de la víctima, Inés Madrigal.
Según sostiene la Fiscalía y la propia afectada, que ejerce la acusación particular, en junio de 1969, nada más nacer, Madrigal fue apartada de su madre biológica y entregada por Vela a una mujer que no podía tener hijos, presentándola en la documentación oficial como la madre real.
La representante del Ministerio Público ha comenzado explicando que "llegar a este momento" de la conclusión del juicio con una acusación definitiva "ha sido complicado" por el tiempo transcurrido, que ha hecho "difícil" la demostración de los hechos y ha planteado problemas con la posible prescripción de los presuntos delitos. Prueba de las dificultades en este tipo de investigaciones, ha añadido, es que existen "cientos o miles de denuncias archivadas en todo territorio nacional".
La defensa ha negado los hechos en su informe final y ha pedido la absolución. Sostiene que todo es producto de un intento de chantaje al doctor por parte de un policía y que lo que se ha difundido son "infundios e infamias". "No se ha acreditado nada", ha afirmado el abogado del Vela, que además considera que en cualquier caso los supuestos delitos habrían prescrito. Por su parte, el acusado no ha querido hacer uso de su derecho a la última palabra. "Nada más, nos vamos", ha afirmado Vela cuando la presidenta del tribunal le ha preguntado si quería decir algo más".
Antes de que se expusieran al tribunal los informes de las acusaciones y la defensa, ha declarado un policía nacional que intervino en la investigación contra el doctor y que ha afirmado que el ginecólogo le reconoció en 2014 durante una conversación telefónica que en la clínica San Ramón que él dirigía se quemaban los libros de registro de las adopciones irregulares. También ha declarado que detectaron indicios de que existía una trama encabezada por el médico ya retirado.
Así lo ha asegurado durante la segunda sesión de la vista oral, que ha arrancado este martes en la sección séptima de la Audiencia Provincial. El juicio se ha retomado después de haberse suspendido el pasado junio por supuestos problemas médicos del acusado, que ha estado presente en la vista en una silla de ruedas. Los forenses determinaron que el médico podía volver al banquillo. En la primera sesión del juicio, el médico negó las acusaciones.
También ha comparecido por videoconferencia la periodista francesa Emilie Delphine, que en 2013 viajó a Madrid para realizar un reportaje sobre el caso de los niños robados. Habló con Vela y le grabó con cámara oculta reconociendo que había "regalado" a la niña.
En su declaración ante el tribunal en la primera jornada de juicio, Madrigal explicó lo que su supuesta madre le contó a los 18 años por primera vez: "Me dijo que era la hija de una señora que no me podía tenerme". Declaró que ya de pequeña había sospechado. "En aquella época, mis padres vivían en Los Molinos. Un día mi madre llegó con un bebé y la gente no la había visto embarazada. Y ya saben que en los pueblos se habla". Cuando en el colegio la , dijo. Pasó el tiempo y un día en el colegio, la llaman "adoptada". "No sabía qué era eso. Y le pregunté a mi madre. A raíz de ahí. Algo extraño había. No encajaba".
[Fuente: Por Manuel Marraco, El Mundo, Madrid, 04sep18]
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