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04ene06
El Gobierno español lleva 6 meses sin pagar a los "niños de la guerra"
Cerca de 1.100 niños asturianos partieron desde Asturias con destino a la Unión Soviética el 24 de septiembre de 1937 huyendo de la Guerra Civil. Algunos de ellos regresaron al Principado en la década de 1950. Otros murieron sin volver a pisar tierra asturiana. 80 --se estima-- tienen derecho a cobrar una compensación económica que, sin embargo, siguen esperando.
Es el caso de Trinidad Rodríguez Ania, una asturiana que vive en la región rusa de Rostov. Trinidad, como otros muchos asturianos exiliados en las distintas repúblicas de la ex Unión Soviética, recibió con júbilo la promesa del ministro de Trabajo, Jesús Caldera, durante su visita al Centro Español de Moscú en enero del 2005. El ministro Caldera prometió entonces un complemento económico a las exiguas pensiones que reciben los niños de la guerra para que pudieran llegar hasta los 6.090 euros anuales.
La promesa, de momento, no se ha cumplido. Los niños que viven en Rusia han cobrado únicamente un anticipo de los tres primeros meses (abril, mayo y junio del 2005). Los de otras repúblicas soviéticas ni siquiera eso. Los cerca de 80 asturianos con derecho a esta pensión del Gobierno español llevan seis meses sin recibir esta prestación económica. El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales asegura, sin embargo, que se dio orden de pago y que no debería haber problemas.
La evidencia, sin embargo, indica lo contrario. Juan Antonio Rodríguez Ania, niño de la guerra retornado a Asturias, conoce al dedillo la situación. Ania, que tuvo ocasión de hablar con su hermana Trinidad el 31 de diciembre, reconoce que se están incumpliendo los pagos. Los residentes en Rusia, unos afortunados , han recibido únicamente las cantidades de los tres primeros meses y, después, nada. Peor suerte han tenido, sin embargo, los residentes en otras repúblicas exsoviéticas como Ucrania. Allí, según indica Ania, no se ha pagado nada. Y eso teniendo en cuenta que tanto Rusia como Ucrania, a diferencia de otras repúblicas, tienen convenios de colaboración con España.
El decreto aprobado por el Parlamento español pretendía devolver cierta dignidad económica a los niños de la guerra que se han visto obligados a residir la mayor parte de su vida fuera de España. El Estado se comprometía con este propósito a implementar las pensiones que reciben hasta un total de 6.090 euros anuales. Ania afirma que, aunque las cantidades desde España puedan parecer escasas, son una buena ayuda para los asturianos residentes en la antigua Unión Soviética. Hace sólo dos años cien euros suponían en Ucrania el equivalente a cuatro meses de pensión en el país. La retribución, pequeña en España, pero no tanto fuera, había animado a algunos exiliados retornados a volver a sus países de acogida. Ania recuerda que ha tenido que desanimar a quienes preparaban ya la vuelta a la antigua URSS con la esperanza de recibir las pensiones prometidas.
[Fuente: La Voz de Asturias, Esp, 03ene06]
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