Información
Equipo Nizkor
        Tienda | Donaciones online
Derechos | Equipo Nizkor       

28oct18


Calvo apura el diálogo con la Iglesia para evitar que Franco repose en la Almudena


Las posibilidades son escasas, escasísimas. Casi ya se puede dar por zanjado que Francisco Franco, una vez exhumado del Valle de los Caídos, reposará para siempre en la cripta de la catedral de la Almudena. En pleno centro de Madrid, a dos pasos del Palacio Real. En el mismo cementerio privado en el que ya yacen la hija del dictador, Carmen Franco, y su marido, el marqués de Villaverde. El lugar elegido por los nietos del general no gusta y preocupa al Gobierno, igual que incomoda a la Iglesia, pero ni uno ni otra pueden hacer mucho para evitarlo. Esa inquietud compartida seguramente aflorará en el primer encuentro que el Ejecutivo de Pedro Sánchez mantendrá este lunes 29 de octubre con el Vaticano, aunque sin demasiadas opciones de que la situación cambie.

La vicepresidenta, Carmen Calvo, se reúne con el número dos del papa Francisco, el cardenal Pietro Parolin, con un "largo listado" de temas sobre la mesa, como reconoció la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, el pasado viernes tras el Consejo de Ministras y Ministros en Sevilla. "No solo está el tema de la exhumación y traslado de los restos de Franco, sino otro largo listado de cuestiones que mantienen las relaciones Iglesia-Estado, como las inmatriculaciones", abundó.

Altos cargos del Gabinete y en el entorno de Calvo reconocen que la salida del dictador del Valle de los Caídos puede entrar de una forma u otra en la conversación de la número dos del Ejecutivo y Parolin, aunque no centrará su diálogo. Será "un intercambio de puntos de vista", dicen desde Vicepresidencia. La también ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad ha ido rebajando expectativas en las últimas semanas, desde que se conoció su encuentro con el cardenal.

Es más, ella misma y el resto del Gobierno han asumido que evitar que el cuerpo de Franco acabe en la Almudena es prácticamente imposible. La clave reside en que el real decreto ley que permite su exhumación de Cuelgamuros, y que ya convalidó el Congreso, especifica que el Ejecutivo solo se haría cargo de los restos y de buscar un lugar de enterramiento en caso de que la familia del dictador no lo precisara. Pero los nietos lo hicieron en su escrito de alegaciones: indicaron que, si finalmente su abuelo es sacado del Valle de los Caídos, a lo que se oponen, quieren que se le dé "cristiana sepultura" en la cripta de la catedral de la Almudena, donde los Franco compraron una tumba a perpetuidad.

Pasada reunión en julio

El arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ya manifestó a principios de este mes que la Iglesia no puede oponerse al deseo de los descendientes del general. "En la cripta hay una propiedad de la familia Franco y como cualquier cristiano tiene derecho a poder enterrarse donde crea conveniente", aseguró el pasado 1 de octubre. Eso no quita para que para la Iglesia sea un problema objetivo y que le inquiete, pues supone convertir la catedral de Madrid —aunque en este caso se trate del cementerio privado anejo, que tiene entrada independiente por la cuesta de la Vega— en un punto de concentración de los nostálgicos del franquismo y potencial foco de conflictos por choque de manifestantes de uno y otro color. Si finalmente Franco es inhumado allí, junto a su hija y su yerno, Cristóbal Martínez-Bordiú, el arzobispado tendría que reforzar la seguridad, por ejemplo.

La Iglesia ya trasladó al Ejecutivo que no pondría objeciones para la salida del dictador del Valle de los Caídos. Lo hizo Osoro en una reunión en julio que, como contó 'El País', mantuvo con el secretario general de la Presidencia del Gobierno, Félix Bolaños, y el subsecretario del Ministerio de la Presidencia, Antonio Hidalgo. Pero desde entonces no se ha producido ninguna cita similar, confirman a este periódico fuentes gubernamentales.

Lo que el Ejecutivo no se plantea, en ningún caso, es promover un decreto que ponga condiciones al lugar de inhumación y que, en la práctica, supondría impedir que Franco llegue a pisar la Almudena. "Eso es un disparate", convienen distintos altos cargos consultados. De este modo, el procedimiento seguirá los cauces y tiempos previstos. El pasado 22 de octubre se agotaron los 15 días hábiles para que las partes presentaran sus alegaciones —ese reloj se puso en marcha el 29 de septiembre, a partir de que por edicto publicado en el BOE se notificase la apertura del proceso de exhumación, ante la imposibilidad de comunicárselo en persona a Merry Martínez-Bordiú, residente fuera de España—, y el siguiente paso es que el Consejo de Ministros dé luz verde a la continuación del expediente. Eso llegará probablemente el próximo viernes, 2 de noviembre, o quizá se posponga una semana más.

En ese Consejo, el Gobierno ordenará que se comunique al Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial, en cuyo término municipal está el Valle de los Caídos, y que se solicite a la Comunidad de Madrid un informe no vinculante en materia de sanidad mortuoria en el plazo de un mes —ese informe simplemente debe certificar que se trata de restos mortales, por mucho que el cuerpo esté embalsamado, y no de un cadáver, ya que han pasado más de cinco años desde su enterramiento—. Concluidas estas actuaciones, el Ejecutivo concederá a la familia otros diez días para que presenten nuevas alegaciones. Cuando acabe ese plazo, el Consejo de Ministros resolverá la exhumación, que se pretende "discreta", y el traslado de los restos... en principio a la Almudena. Una simple suma de tiempos hace ver que la salida de Franco no será en ningún caso antes del 6 de diciembre, Día de la Constitución, jornada mayor de los fastos del 40 aniversario. Llegará hacia finales de año o principios de 2019.

Apremio de Podemos

Para el Ejecutivo, la voluntad de los Franco de enterrar a su abuelo en el centro de la capital es "una patata caliente para la Iglesia", que está "muy preocupada" por la posibilidad de que la catedral se acabe convirtiendo en un templo de peregrinación franquista, en un "centro político, de partidarios y contrarios, en lugar de una zona de culto".

¿Qué puede hacer el Gobierno para evitarlo? "Hay pocas posibilidades de evitar que el dictador sea enterrado en la Almudena", señalan fuentes del Gabinete, que recuerdan que la familia compró esa sepultura, en un panteón en el que están enterradas más de mil personas. La única vía, advierten, es que la Iglesia sea capaz de convencer a los Franco de la inconveniencia de trasladar allí al dictador. La interlocución de la Moncloa con ellos está totalmente rota por la guerra que estos han emprendido contra Sánchez.

Vistas las dificultades, el Ejecutivo insiste en hacer pedagogía. Subraya que lo importante es que Franco deje de estar en un mausoleo de Estado, y que es un mal menor que pase a descansar en el centro de Madrid, porque lo hará en una cripta privada y en la que no gozará de un lugar preeminente. También Celaá se refirió a la resolución aprobada el pasado 25 de octubre por el Parlamento Europeo, consensuada por varios grupos (incluidos populares y liberales), que pedía la ilegalización de entidades que exalten el fascismo, como la Fundación Francisco Franco. También llamaba a una cultura común de memoria histórica que rechace los crímenes fascistas del pasado.

Las posibilidades son escasas, escasísimas. Casi ya se puede dar por zanjado que Francisco Franco, una vez exhumado del Valle de los Caídos, reposará para siempre en la cripta de la catedral de la Almudena. En pleno centro de Madrid, a dos pasos del Palacio Real. En el mismo cementerio privado en el que ya yacen la hija del dictador, Carmen Franco, y su marido, el marqués de Villaverde. El lugar elegido por los nietos del general no gusta y preocupa al Gobierno, igual que incomoda a la Iglesia, pero ni uno ni otra pueden hacer mucho para evitarlo. Esa inquietud compartida seguramente aflorará en el primer encuentro que el Ejecutivo de Pedro Sánchez mantendrá este lunes 29 de octubre con el Vaticano, aunque sin demasiadas opciones de que la situación cambie.

La vicepresidenta, Carmen Calvo, se reúne con el número dos del papa Francisco, el cardenal Pietro Parolin, con un "largo listado" de temas sobre la mesa, como reconoció la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, el pasado viernes tras el Consejo de Ministras y Ministros en Sevilla. "No solo está el tema de la exhumación y traslado de los restos de Franco, sino otro largo listado de cuestiones que mantienen las relaciones Iglesia-Estado, como las inmatriculaciones", abundó.

Altos cargos del Gabinete y en el entorno de Calvo reconocen que la salida del dictador del Valle de los Caídos puede entrar de una forma u otra en la conversación de la número dos del Ejecutivo y Parolin, aunque no centrará su diálogo. Será "un intercambio de puntos de vista", dicen desde Vicepresidencia. La también ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad ha ido rebajando expectativas en las últimas semanas, desde que se conoció su encuentro con el cardenal.

Las posibilidades de que el general no sea enterrado en la cripta de la catedral de Madrid son pequeñas: el decreto regula solo la exhumación

Es más, ella misma y el resto del Gobierno han asumido que evitar que el cuerpo de Franco acabe en la Almudena es prácticamente imposible. La clave reside en que el real decreto ley que permite su exhumación de Cuelgamuros, y que ya convalidó el Congreso, especifica que el Ejecutivo solo se haría cargo de los restos y de buscar un lugar de enterramiento en caso de que la familia del dictador no lo precisara. Pero los nietos lo hicieron en su escrito de alegaciones: indicaron que, si finalmente su abuelo es sacado del Valle de los Caídos, a lo que se oponen, quieren que se le dé "cristiana sepultura" en la cripta de la catedral de la Almudena, donde los Franco compraron una tumba a perpetuidad.

La cripta de la casta: el entierro de los Franco en la Almudena choca con el Vaticano

Carlos Prieto

El Código de Derecho Canónico prohíbe enterrar dentro de los templos. La Iglesia española hace la vista gorda para financiarse: algunos sarcófagos se han vendido por cerca de 200.000 euros

Pasada reunión en julio

El arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ya manifestó a principios de este mes que la Iglesia no puede oponerse al deseo de los descendientes del general. "En la cripta hay una propiedad de la familia Franco y como cualquier cristiano tiene derecho a poder enterrarse donde crea conveniente", aseguró el pasado 1 de octubre. Eso no quita para que para la Iglesia sea un problema objetivo y que le inquiete, pues supone convertir la catedral de Madrid —aunque en este caso se trate del cementerio privado anejo, que tiene entrada independiente por la cuesta de la Vega— en un punto de concentración de los nostálgicos del franquismo y potencial foco de conflictos por choque de manifestantes de uno y otro color. Si finalmente Franco es inhumado allí, junto a su hija y su yerno, Cristóbal Martínez-Bordiú, el arzobispado tendría que reforzar la seguridad, por ejemplo.

Por ahora no se plantea una nueva norma que regule el enterramiento. El expediente sigue su curso y entra ya en la segunda fase

La Iglesia ya trasladó al Ejecutivo que no pondría objeciones para la salida del dictador del Valle de los Caídos. Lo hizo Osoro en una reunión en julio que, como contó 'El País', mantuvo con el secretario general de la Presidencia del Gobierno, Félix Bolaños, y el subsecretario del Ministerio de la Presidencia, Antonio Hidalgo. Pero desde entonces no se ha producido ninguna cita similar, confirman a este periódico fuentes gubernamentales.

Lo que el Ejecutivo no se plantea, en ningún caso, es promover un decreto que ponga condiciones al lugar de inhumación y que, en la práctica, supondría impedir que Franco llegue a pisar la Almudena. "Eso es un disparate", convienen distintos altos cargos consultados. De este modo, el procedimiento seguirá los cauces y tiempos previstos. El pasado 22 de octubre se agotaron los 15 días hábiles para que las partes presentaran sus alegaciones —ese reloj se puso en marcha el 29 de septiembre, a partir de que por edicto publicado en el BOE se notificase la apertura del proceso de exhumación, ante la imposibilidad de comunicárselo en persona a Merry Martínez-Bordiú, residente fuera de España—, y el siguiente paso es que el Consejo de Ministros dé luz verde a la continuación del expediente. Eso llegará probablemente el próximo viernes, 2 de noviembre, o quizá se posponga una semana más.

Marcha desde la Puerta de Sol hasta la Almudena convocados por colectivos de memoria histórica

En ese Consejo, el Gobierno ordenará que se comunique al Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial, en cuyo término municipal está el Valle de los Caídos, y que se solicite a la Comunidad de Madrid un informe no vinculante en materia de sanidad mortuoria en el plazo de un mes —ese informe simplemente debe certificar que se trata de restos mortales, por mucho que el cuerpo esté embalsamado, y no de un cadáver, ya que han pasado más de cinco años desde su enterramiento—. Concluidas estas actuaciones, el Ejecutivo concederá a la familia otros diez días para que presenten nuevas alegaciones. Cuando acabe ese plazo, el Consejo de Ministros resolverá la exhumación, que se pretende "discreta", y el traslado de los restos... en principio a la Almudena. Una simple suma de tiempos hace ver que la salida de Franco no será en ningún caso antes del 6 de diciembre, Día de la Constitución, jornada mayor de los fastos del 40 aniversario. Llegará hacia finales de año o principios de 2019.

Apremio de Podemos

Para el Ejecutivo, la voluntad de los Franco de enterrar a su abuelo en el centro de la capital es "una patata caliente para la Iglesia", que está "muy preocupada" por la posibilidad de que la catedral se acabe convirtiendo en un templo de peregrinación franquista, en un "centro político, de partidarios y contrarios, en lugar de una zona de culto".

El Gobierno se centra en hacer pedagogía: lo importante es que Franco abandone un mausoleo de Estado. Ese es el "hecho histórico"

¿Qué puede hacer el Gobierno para evitarlo? "Hay pocas posibilidades de evitar que el dictador sea enterrado en la Almudena", señalan fuentes del Gabinete, que recuerdan que la familia compró esa sepultura, en un panteón en el que están enterradas más de mil personas. La única vía, advierten, es que la Iglesia sea capaz de convencer a los Franco de la inconveniencia de trasladar allí al dictador. La interlocución de la Moncloa con ellos está totalmente rota por la guerra que estos han emprendido contra Sánchez.

Vistas las dificultades, el Ejecutivo insiste en hacer pedagogía. Subraya que lo importante es que Franco deje de estar en un mausoleo de Estado, y que es un mal menor que pase a descansar en el centro de Madrid, porque lo hará en una cripta privada y en la que no gozará de un lugar preeminente. También Celaá se refirió a la resolución aprobada el pasado 25 de octubre por el Parlamento Europeo, consensuada por varios grupos (incluidos populares y liberales), que pedía la ilegalización de entidades que exalten el fascismo, como la Fundación Francisco Franco. También llamaba a una cultura común de memoria histórica que rechace los crímenes fascistas del pasado.

"Hagamos lo que haya que hacer para evitar que los restos de un dictador estén en el centro de Madrid", emplazaba a Sánchez el líder de Podemos, Pablo Iglesias, el pasado miércoles en el Congreso. El presidente no recogió el guante: "Lo importante para la izquierda es que el dictador salga de un espacio que pertenece al Estado. Esto es lo importante, el hecho histórico. No desviemos la atención, no le demos argumentos a la derecha. Lo que va a ocurrir cuando se exhumen los restos del dictador es que se va a acabar con un mausoleo que llenaba de vergüenza al conjunto de progresistas de este país".

Franco tal vez entre, por tanto, en la conversación de Calvo con el número dos del Papa. Pero no centrará el diálogo entre ambos, aunque Vicepresidencia prefiere no ofrecer detalles hasta que pase la reunión, programada para el lunes a primera hora de la mañana. Una cuestión de mucho peso es la de las inmatriculaciones, los bienes que la Iglesia registró a su nombre en muchos casos sin acreditar que eran de su propiedad. Ese privilegio parte de una ley de 1946, y se amplió con la reforma de la misma impulsada por José María Aznar en 1998, la que permitió a la Iglesia que pudiera adueñarse de inmuebles como si fuera una institución pública. Y así logró inscribir la mezquita-catedral de Córdoba en 2006 y por solo 30 euros. Entre otros tantos bienes. La potestad de poder registrar a su nombre inmuebles fue eliminada con la última reforma de la Ley Hipotecaria, en 2015.

¿Y qué pasa con el IBI?

El gran coladero llegó, por tanto, con la reforma de 1998, ya que promovió que hasta los lugares de culto pudieran inscribirse. A partir de entonces se produjeron miles de inmatriculaciones, aunque no hay cifras, pero se cree que, desde 1946, el número de bienes registrados a nombre de la Iglesia ronde los 40.000. El Gobierno se comprometió a elaborar un censo de los inmuebles inmatriculados, aunque en ese solo figurarán, en principio, aquellos inmuebles inscritos desde la reforma de 1998 y hasta 2015. El Ejecutivo procederá a "una depuración física y jurídica" si se constata que la Iglesia registró bienes de dominio público como si fuesen privados. Es decir, que se los reclamará.

En el equipo de Calvo inciden en la importancia de esta primera toma de contacto con Parolin, el primer encuentro entre los dos Estados desde la llegada de Sánchez al poder. El Gobierno quiere seguir manteniendo buenas relaciones con Roma y no se plantea, al menos por ahora, iniciar el proceso para denunciar los Acuerdos con la Santa Sede de 1979, pese a que figuraba en su último programa electoral, y en la resolución congresual de 2017. La designación como embajadora en el Vaticano de Carmen de la Peña, una diplomática de larga carrera, y aprobada el pasado viernes por el Consejo de Ministros, es una señal de continuidad.

Un punto potencial de conflicto sería la exigencia a la Iglesia del IBI. En diciembre de 2013, el pleno del Tribunal Constitucional avaló la exención del pago del impuesto de bienes inmuebles, tanto de los edificios de culto como de los destinados al resto de sus fines. El TC se remitía al Concordato de 1979, que tiene categoría de tratado internacional. En el artículo IV. A del acuerdo sobre asuntos económicos, se consagra la "exención total y permanente de la contribución territorial urbana". La resolución del 39º Congreso del PSOE incluía la exigencia del pago del IBI y del IAE para las actividades que generen "ingresos económicos".

En el equipo de Calvo subrayan que en ningún caso se utilizarán asuntos como las inmatriculaciones o el pago del IBI como mecanismo de presión para que la Iglesia mueva ficha con los Franco. Son materias muy distintas. La exhumación del dictador será el punto que más expectación genere, pero no es el más importante que viaja en la maleta de la vicepresidenta rumbo a Roma.

[Fuente: Por Juanma Romero, El Confidencial, Madrid, 28oct18]

Tienda Donaciones Radio Nizkor

DDHH en Espaņa
small logoThis document has been published on 01Nov18 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes.