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22dic18
El fracaso de Sánchez en Barcelona preocupa al PSOE y le obliga al pronto adelanto electoral
Las últimas salidas del Consejo de Ministros de Pedro Sánchez se han saldado con dos rotundos fracasos. El Consejo celebrado en Sevilla antes de las elecciones de Andalucía acabó con batacazo del PSOE y la pérdida del Gobierno andaluz después de 36 años de absoluto control socialista. Y el Consejo de Barcelona resultó otro desastre porque Sánchez, que llegó con regalos a Torra pero no logró que los soberanistas le garantizaran los Presupuestos de 2019 ni el acatamiento de la Constitución y la legalidad.
Lo que es peor, después del encuentro la portavoz de Torra, Elsa Artadi, calificó de inútil la visita de Sánchez y dijo que mejor hubiera sido que Sánchez se hubiera quedado en Madrid.
Lo que confirma el fracaso del Consejo de Barcelona y el encuentro con Torra y sus consejeros. El que fue muy mal preparado por la vicepresidenta Carmen Calvo a la que Artadi le vendió un infame comunicado conjunto donde Torra se llevó el gato al agua al imponer la palabra ‘conflicto’. Y ello sin mencionar el golpe de Estado al tiempo que se incluía una mención a la ‘respuesta democrática’ (que es como llaman los soberanistas al referéndum de autodeterminación), en lugar de hablar de una ‘respuesta constitucional’.
Y por supuesto en estas circunstancias Torra se negó a renunciar a una acción unilateral independentista y sigue sin aceptar la Constitución y la legalidad que son las condiciones previas que Sánchez debía de haber impuesto a Torra antes de viajar a Barcelona y de sentarse a dialogar.
Si a todo ello añadimos el espectáculo lamentable del Consejo de Ministros rodeado por manifestantes y los casos de violencia con decenas de Mossos heridos y calles y carreteras cortadas, veremos que el viaje a Barcelona del Gobierno de Sánchez ha resultado ser un rotundo fracaso.
Y políticamente impresentable porque Sánchez además reunió con Ada Colau, otra que insulta a España, la Monarquía y la Constitución pero no se vio con los líderes de lo partidos constitucionales catalanes y especialmente con Inés Arrimadas que lidera el primer partido catalán.
La consecuencia de todo ello es que Sánchez no logrará el apoyo de los partidos soberanistas para aprobar los Presupuestos de 2019 y, por lo tanto, deberá adelantar las elecciones generales, probablemente el 26 de mayo de año entrante y en coincidencia con los comicios europeos, autonómicos y municipales.
Las cuestión de los Presupuestos creemos que ocupó el centro de la hora y media de conversación de Sánchez con Torra, aunque luego lo negaran. Un diálogo donde Torra volvería a hablar de autodeterminación y los presos del golpe catalán. Mientras que Sánchez le hablaría a Torra de la posibilidad de que la derecha, que pide el 155, gane las elecciones y que ello acabe con la posibilidad de los indultos de los que hablan miembros del Gobierno.
Al fondo de todo ello un creciente malestar y preocupación de los dirigentes regionales y de la vieja guardia nacional del PSOE porque ven que el delirio catalán de Sánchez los conduce, como ocurrió en Andalucía a un desastre electoral.
[Fuente: Por Rafael Halcón, República de las ideas, Madrid, 22dic18]
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