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09dic09
El presidente de El Salvador da la espalda a Chávez: 'No vamos a ingresar en ALBA'
El presidente de El Salvador, el izquierdista Mauricio Funes, descartó cualquier posibilidad de que el gobierno que preside se sume a la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), la plataforma de integración creada hace cinco años por Venezuela y Cuba, y que en la actualidad está integrada por ocho países. "No vamos a ingresar en ALBA", ha dicho el mandatario.
Funes asumió el Ejecutivo salvadoreño el pasado 1 de junio, y lo hizo como militante del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN). Durante la guerra civil salvadoreña (1980-1992) el FMLN era la guerrilla; tras la firma de los Acuerdos de Paz, se convirtió en partido político, pero mantiene su carácter revolucionario y socialista en los estatutos.
De hecho, la negativa de Funes llega apenas unas horas después de que el vicepresidente de la República, Salvador Sánchez Cerén, regresara de un viaje oficial a Cuba. Según la Agencia Cubana de Noticias (AIN), Sánchez Cerén dijo en La Habana que la incorporación de El Salvador al ALBA era "un hecho natural" y que el Gobierno "lo estaba analizando".
"Ni siquiera lo estamos considerando", desacreditó Funes al vicepresidente en un discurso pronunciado la noche del martes.
Las razones del no
El presidente de El Salvador argumentó la negativa al ingreso en ALBA. "Tenemos una alianza estratégica con Estados Unidos, no solamente porque la inmensa mayoría de nuestros compatriotas en el exterior vive y trabaja allí, sino también porque es un gran mercado y con él debemos ampliar más y más nuestro intercambio", dijo Funes.
Asimismo, señaló que la apuesta de El Salvador debe ser fomentar la integración con el resto de países centroamericanos antes que sumarse a proyectos de corte ideológico: "Pertenecemos al Sistema de la Integración Centroamericana (SICA). Somos Centroamérica, y Centroamérica es nuestro lugar en el mundo".
Funes se comprometió a promover la integración centroamericana: "Tenemos ya un lugar de pertenencia como nación y debemos trabajar para institucionalizarlo y fortalecerlo cada vez más. Abandonarlo por el ALBA u otro intento de agrupamiento de orden político o ideológico sería dejar de lado nuestra historia y nuestros compromisos con los pueblos hermanos de Centroamérica".
En la actualidad, el ALBA está integrada por ocho países: Venezuela, Cuba, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, San Vicente y Granadinas, Antigua y Barbuda y Dominica. Honduras también formaba parte, pero el golpe de Estado que tuvo lugar en junio contra el presidente constitucional, Manuel Zelaya, alejó el país del organismo.
Tensión con el FMLN
El discurso de Funes es un claro desafío a la dirigencia del FMLN, partido que pertenece al Foro de Sao Paulo y que a finales de noviembre firmó el llamado Compromiso de Caracas. Se trata de una iniciativa promovida por el partido del presidente venezolano, Hugo Chávez, que pretende plasmarse en la creación el próximo año de la V Internacional Socialista.
El firmante de esa carta fue el propio Salvador Sánchez Cerén, un histórico militante del FMLN. Es, de hecho, el único comandante firmante de los Acuerdos de Paz que aún milita en el partido.
En las últimas semanas Sánchez Cerén y otros dirigentes históricos del partido han mantenido con Mauricio Funes un pulso sobre el rumbo que debe tomar el Gobierno. Así, los dos últimos viajes de Sánchez Cerén han sido a Venezuela y a Cuba, donde se ha reunido con sus respectivos presidentes: Hugo Chávez y Raúl Castro.
Mauricio Funes, por su parte, tiene como referentes otros gobiernos de izquierda; en especial, el encabezado en Brasil por Luiz Inácio Lula da Silva.
En la actualidad, y a pesar de la crisis económica y de los elevados índices de criminalidad, Funes es el presidente con las cifras de aprobación más elevadas de todo el continente americano.
[Fuente: El Mundo, Madrid, 09dic09]
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