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21oct06


Uribe opta por la vía militar con las FARC


El presidente colombiano, Alvaro Uribe, cerró ayer las puertas a un canje de secuestrados por guerrilleros presos al adjudicarles a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) un atentado con coche bomba que anteayer dejó 25 heridos en Bogotá y al anunciar "un rescate militar" de los rehenes.

El general Mario Montoya, jefe del ejército colombiano, estaba a pocos metros del estacionamiento del complejo militar donde estalló el coche bomba. El jefe castrense se encontraba dictando una conferencia a 45 oficiales de la reserva del ejército.

El anuncio de Uribe constituyó un duro golpe para los familiares de secuestrados por las FARC, cuyas esperanzas de volver a ver a sus seres queridos con vida habían crecido tras un intercambio de mensajes entre el gobierno y el grupo guerrillero. También provocó objeciones de Francia, que tiene un especial interés en el tema, dado que la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt, secuestrada en febrero de 2002 por las FARC (ver aparte), es ciudadana francesa.

La guerrilla tiene en su poder un grupo de 59 personas, en el que se encuentran políticos, militares, policías y tres estadounidenses contratados para trabajar en el Plan Colombia contra las drogas, a cambio de cuya libertad exige que el gobierno libere a unos 500 rebeldes encarcelados, incluidos dos extraditados a los Estados Unidos.

Uribe dijo que su gobierno no caerá en la trampa de la guerrilla "que trafica con el dolor de los familiares de los secuestrados en busca de una zona de despeje [libre de militares] para recuperar su capacidad terrorista".

"Mientras persistan estas acciones terroristas hoy el único camino que queda es el rescate militar y policial de los secuestrados -agregó-. No vamos a permitir que nuestra buena voluntad para el acuerdo humanitario sea objeto de la farsa de las FARC."

La declaración de Uribe -que obtuvo su reelección en mayo pasado gracias a su política de "mano dura" con la guerrilla- marca un giro abrupto respecto de su postura de principios de mes, cuando se había mostrado favorable a reunirse con las FARC para acelerar el intercambio humanitario y establecer una zona de despeje para hacerlo posible.

Como parte de ese cambio, el presidente revocó ayer las autorizaciones otorgadas al Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, y al ex candidato presidencial Alvaro Leyva, para negociar las condiciones del intercambio.

"Fantoche"

Uribe afirmó que, mediante la escucha de una llamada telefónica, se estableció que el atentado, que tuvo lugar en la Universidad Militar de Bogotá anteayer, fue ordenado por Jorge Briceño, alias "el Mono Jojoy", uno de los miembros del secretariado de las FARC. Esa conversación no fue difundida para no entorpecer la investigación, afirmó el comandante de las fuerzas armadas, Freddy Padilla.

"Pregunto a Briceño si tiene la cobardía de negar que ordenó, desde el refugio cobarde de la selva, este atentado contra la ciudad de Bogotá", dijo Uribe, que endureció su discurso al visitar el área destruida por la explosión del coche bomba. También denunció que los líderes de las FARC, Raúl Reyes e Iván Márquez, se esconden en la selva ecuatoriana y en la frontera con Venezuela, donde ayer poblados venezolanos estaban siendo desalojados por guerrilleros colombianos, según denunció el diario El Nacional de Caracas.

"¿Qué dirá el terrorista Raúl Reyes, terrorista fantoche de apariciones internacionales [...] que cobardemente se esconde en la selva ecuatoriana sin el consentimiento de Ecuador y desde allí lucra con el negocio de la cocaína?", se preguntó Uribe. Y continuó: "¿Qué dirá el terrorista Iván Márquez, que cobardemente se esconde en la selva fronteriza de Venezuela, sin el consentimiento del gobierno?"

Por su parte, las FARC se desvincularon totalmente del atentado y acusaron a Uribe de "cerrar de un portazo" las posibilidades de diálogo de paz. "Utilizando un lenguaje soez, [el presidente colombiano] cierra de un portazo la posibilidad de un canje o intercambio", afirmaron las FARC en un comunicado divulgado en Internet. "Nunca ha tenido voluntad política ni para el canje ni para buscar diálogos de paz", agregaron.

"El atentado en la Escuela Superior de Guerra, con toda la seguridad que hay en ella, con el tipo de explosivo utilizado y la modalidad utilizada, nos hace mirar hacia otro lado", afirmó la organización guerrillera. Y señaló como responsables a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y al Departamento Estadounidense Antidrogas (DEA), que, en su opinión, "tienen la capacidad tecnológica y logística" para realizar atentados de esta clase.

En tanto, el canciller francés, Philippe Douste-Blazy, dijo, en respuesta a las declaraciones de Uribe, que su país "señala su oposición a cualquier operación de rescate de los secuestrados por la fuerza". Douste-Blazy lamentó que este anuncio de Uribe se produjera en momentos en que las recientes declaraciones del gobierno y las FARC habían provocado el "optimismo de todos".

Francia, España y Suiza han sido los países que han colaborado en las aproximaciones entre el gobierno de Uribe y la guerrilla para una salida negociada a la cuestión de los rehenes.

[Fuente: La Nación, Agencias AP, DPA, EFE y AFP, Bs As, Arg, 21oct06]

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