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24jul10
Cuatro liberadas envían mensaje de agradecimiento
"¡Gracias a todos!". Fue la expresión que salió del corazón de las cuatro defensoras de derechos humanos que estuvieron secuestradas por el Eln.
A la misma manifestación se unieron los familiares quienes durante 15 días padecieron los impactos del plagio.
En sus casas de Ocaña y Cúcuta disfrutaron de la libertad Lizbeth Jaime, Nohora Guerrero, María Angélica González y Mónica Fernanda Duarte Rodríguez.
Las dos primeras se quedaron en la Ciudad de Los Caro y las últimas llegaron ayer a la capital de Norte de Santander.
Relataron los pormenores de la retención en un agitado día de contacto permanente con los periodistas de medios de comunicación nacionales y locales.
Destacaron la tarea del sacerdote Gregorio Salazar, del corregimiento de San Pablo (Teorama) y de monseñor Leonel Pineda, en procura de buscar que regresaran sanas y salvas.
De la comisión a la que el Frente de Guerra Nororiental del Eln le entregó a las cuatro mujeres representantes de organismos humanitarios, hicieron parte el personero de Ocaña, Jesús Antonio Sánchez Clavijo y el periodista de Radio Catatumbo, Nelson Vargas Ortegón.
Hubo palabras de agradecimiento para la comunidad internacional que por intermedio de la Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Amnistía Internacional y organizaciones europeas que activaron las alarmas y estuvieron atentas al caso.
Resaltaron la función de la prensa, radio, televisión y páginas web de Norte de Santander, Colombia y el mundo, que siguieron la noticia y evitaron que cayera en el olvido el múltiple plagio de las defensoras de derechos humanos.
El mensaje se dirigió también a las organizaciones sociales del departamento y el país, a la Fundación Progresar, la Gobernación de Norte de Santander, la Defensoría del Pueblo y a otras instituciones.
El Defensor del Pueblo, Volmar Pérez Ortiz destacó la liberación de Lizbeth, Nohora, María Angélica y Mónica Fernanda, quienes habían sido hechas rehenes hace dos semanas en la zona rural de Teorama.
"Llamo una vez más la atención sobre el respeto que se debe guardar para quienes se dedican a la defensa de los derechos humanos como ha sido el caso de las personas que acaban de regresar a la libertad, quienes venían adelantando actividades de capacitación", precisó un comunicado de la entidad.
Complacencia expresó el gobernador William Villamizar Laguado por el feliz desenlace de este caso.
"Les hacemos llegar un gran abrazo a las familiares (de las defensoras de derechos humanos)", declaró.
Confió en que ese tipo de situaciones no se vuelvan a repetir, a la vez que hizo un llamado a los grupos alzados en armas para que permitan el trabajo de las organizaciones humanitarias a favor de los habitantes de El Catatumbo.
[Fuente: La Opinión, Cúcuta, 24jul10]
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