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23jun06
Más elementos sobre infiltración militar norteamericana.
El gobierno presentó en las últimas horas nuevos elementos sobre la infiltración de militares norteamericanos en Bolivia, pese a un fallido desmentido de la embajada de Washington.
El vicepresidente Alvaro García y el ministro de Defensa, Walker San Miguel, ratificaron la denuncia del presidente Evo Morales, en el sentido de que han ingresado a este país militares estadounidenses encubiertos, con la fachada de ser estudiantes o turistas.
Lo que ha dicho el Presidente es una verdad y se trata de una situación que preocupa al Gobierno, por lo que está siendo investigada, señaló García.
San Miguel, por su parte, fue más preciso y citó informes de inteligencia según los cuales hay una veintena de norteamericanos participantes en un seminario sobre solución de conflictos en la universidad privada Nur, de la oriental ciudad de Santa Cruz.
Precisó que parte de esos extranjeros son militares, según los reportes preliminares, en proceso de evaluación.
Las declaraciones oficiales desmintieron aseveraciones de fuentes de la embajada estadounidense no identificadas que dijeron a la prensa que la acusación de Morales carecía de fundamento.
La denuncia presidencial fue hecha en días pasados durante concentraciones populares en el interior, en las cuales reveló que el embajador de Washington en La Paz, David Greenlee, le solicitó una reunión, posiblemente para reclamarle sus denuncias antimperialistas.
Acotó que "quisiera que también me diga por qué entran militares norteamericanos camuflados", señaló.
Manifestó que ahora el argumento contra Bolivia ya no es el narcotráfico o el comunismo, sino el terrorismo, "un pretexto para dominarnos, someternos, para controlar los recursos naturales".´
En mayo pasado, el jefe de Estado aseveró entonces que está en marcha un complot contra su administración, comenzado cuando el presidente estadounidense, George W. Bush, sostuvo que hay un deterioro de la democracia en Bolivia.
El mandatario indígena agregó que, tras la nacionalización de los hidrocarburos, empresas petroleras y alguna gente que escapó después de matar al pueblo (alusión al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, radicado en Estados Unidos), quieren organizarse para derrocar a la democracia boliviana.
Morales subrayó que no tiene miedo a los conspiradores y está decidido a enfrentarlos para dignificar a Bolivia y avanzar a la recuperación de todos los recursos naturales, a través de la Constituyente que será electa el próximo 2 de julio.
[Fuente: Prensa Latina, La Paz, 22jun06]
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