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21mar14
El Mas analiza sus opciones ante un eventual retorno de Mario Cossío
En el último mes, el presidente Evo Morales Ayma se ha reunido de forma pública y privada, de forma directa al menos en cuatro ocasiones con el gobernador Lino Condori, alcaldes, asambleístas, ejecutivos seccionales de Tarija y sus organizaciones sociales. Primero fue a cuenta de los proyectos Mi Riego en el Salón Rojo, luego recibió al alcalde Óscar Montes y Rodrigo Paz un día y a Lino Condori y todos sus ejecutivos seccionales al otro día en La Paz, luego se desplazó al Chaco y en esta última semana, dos veces con los asambleístas (una por intermediación).
No es la preparación del 15 de abril. Esto no pasa en el resto del país. Algo está pasando en el Movimiento Al Socialismo (MAS) de Tarija. A Lino se le acaban las excusas aunque cada vez las dice con más aplomo. "Cuando tenemos una reunión previa es para armar proyectos que por ejemplo el programa mi agua, programa mi riego, proyectos Evo Cambia o para ultimar detalles. Mayormente cuando tenemos una reunión previa es para ver esos temas y que se puede hacer".
¿Por qué Evo?
No es normal ver al Presidente organizando asuntos de partido en otros departamentos, pero Tarija es la excepción. Será por la particular idiosincrasia, la cultura de las republiquetas, o la apresurada y desordenada toma del poder en 2010. Hoy estarán en la capital el ministro "coordinador político con Tarija", Juan José Sosa (como él mismo se autodenominó) y la otra ministra tarijeña, Sandra Gutiérrez, pero los lineamientos los vino a dar Evo.
Es habitual en sus apariciones en Tarija escucharle dar instrucciones de cómo gastar los recursos o recomendar a alcaldes y ejecutivos "hermanos chaqueños" no hacerse la guerrilla. Con todo, las peleas en el partido no han parado nunca. Hoy por hoy, Ramón Vilca sigue en la dirección de Recursos Humanos pese a que Condori anunció su destitución por presión del MAS. La Brigada Parlamentaria está paralizada porque medio MAS no reconoce a la presidenta, que es del MAS y en la Asamblea Legislativa crecen los "librepensantes".
Elecciones y Mario Cossío
La campaña electoral está lanzada y el propio Presidente se ha marcado un objetivo: El 74 por ciento de la votación. En el plano más realista, operadores y estrategas reconocen que el objetivo es asegurar los dos tercios en las cámaras y ganar en todo el país, aunque sea por la mínima. Tarija y sus nueve diputados y cuatro senadores no es la región más importante por número de votos, pero sí por su valor simbólico.
A diferencia que Beni y Santa Cruz, el MAS gobierna en Tarija desde 2010 fruto de una maniobra legal en su momento (aunque ya cuestionada por su manifiesto ataque al principio jurídico de la presunción de inocencia) que actualmente está expulsada del ordenamiento jurídico. Desde noviembre de 2012 no se puede suspender a nadie a simple acusación fiscal.
Un partido acostumbrado a la confrontación ha logrado gobernabilidad gracias a su particular forma de hacer política, transfiriendo enormes recursos hacia las provincias y los municipios y ensanchando exponencialmente la base de funcionarios públicos en servicios centrales y en las desconcentradas, lo que ha permitido elevar los porcentajes de ejecución presupuestaria, un lastre del primer año de gestión.
¿Desde la oposición o desde el Gobierno?
¿Es suficiente para ganar las elecciones? Las respuestas varían dependiendo si proceden del partido, de la Gobernación o del Ministerio de la Presidencia, pero coinciden en un talón de Aquiles: en el imaginario, la corrupción se ha asociado a la gestión de una forma que el MAS no se puede permitir.
En 2013, el escándalo de la Condorvía, que pasó de 29,9 millones de dólares a 48 en apenas un año y que hasta la fecha no se ha aclarado, opacó una gestión que ya había empezado con pequeños escándalos de coimas, "canales fantasmas" o trépanos usados.
Ni Condori ni Roberto Ruíz han logrado reanudar las obras de la Villa Olímpica ni licitar la avenida Ecológica en más de tres años, y las que ha licitado han sido judicializadas. El caso de la Iscayachi - Final Copacabana, adjudicada supuestamente a un consorcio sin experiencia, lo ha sentado incluso en el banquillo de acusados. La Bermejo - San Antonio, con supervisión y ejecución a dos familiares, uno de ellos prominente hombre del MAS y la Copacabana - Yunchará, con 16 millones entregados sin haber dado orden de proceder son dos bombas de tiempo, entre otros muchos proyectos, como los eléctricos, en el que faltan explicaciones.
Condori sobrevivió a compartir Margarita con Chuquisaca y se ha anotado el tanto de Servicios Eléctricos de Tarija, logrando el título habilitante cuando muchos daban/deseaban su desahucio definitivo. Hoy llegará el ministro Sosa para hablar de Hidrocarburos, pero no desvelará el lugar donde se instalarán las petroquímicas.
La Asamblea tiene sobre la mesa el pedido de reposición del gobernador Mario Cossío, suspendido y fugado, acosado por una docena de casos de corrupción. Jugarse la carta de la democracia rehabilitándole en el cargo no es una mano demasiada arriesgada. La mayoría coincide en que no volverá, Camino al Cambio se quedará sin argumento de "golpe de Estado" y en el peor de los casos, el caos organizativo será tal que los recursos quedarán congelados en La Paz en medio de una campaña electoral que promete ser de dimensiones estratosféricas.
Fortunato Llanos, el presidente del legislativo, se retiró un poco antes de la conclusión de la reunión con el rostro serio y firme, como quien acaba de encontrar el abrelatas.
[Fuente: Por Jesús Cantín, El Nacional, Tarija, 21mar14]
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