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23may13
Guaranís revocan mandato a la asambleista regional Aida Velásquez
Hasta la fecha, fueron cuatro los asambleístas indígenas revocados por sus propios pueblos en Tarija; el método que se empleó fue el de "usos y costumbres", establecido en el artículo 278 de la Constitución Política del Estado (CPE). De los tres pueblos indígenas del departamento, weenhayek, guaraní y tapiete, sólo los guaraníes mantenían a sus autoridades sin cambios, sin embargo, ayer se hizo oficial el pedido de revocar a su asambleísta regional Aida Velásquez.
El trasfondo de las últimas revocatorias indígenas se centra en que sus representantes habrían actuado de manera contraria a los intereses indígenas, "involucrándose en pugnas políticas" y no trabajando para el bienestar de sus pueblos.
El Tribunal Electoral Departamental (TED) recibió ayer la quinta solicitud de revocatoria por "usos y costumbres", esta vez para la asambleísta regional del pueblo guaraní del municipio de Yacuiba. Según el capitán grande, Jorge Mendoza, esta decisión fue tomada en consenso con los integrantes del pueblo.
El presidente del TED, Nolberto Gallardo, confirmó la solicitud de revocatoria y mencionó que los guaraníes propusieron a Marcelino Reyes. Añadió que se analizará los requisitos de fondo para que se pueda proceder a la solicitud del capitán grande; también dijo que no hay plazos para la petición de revocatoria ya que estos pueblos "tienen autonomía de gestión y pueden solicitar la revocatoria cuando la vean conveniente".
Empero, dentro de esta solicitud, un detalle no quedaría claro. La segunda capitana grande de la zona del Chaco, Rosario Oquenday, dio a conocer que si bien en una asamblea del pueblo guaraní se definió revocar a Velázquez, "en ningún momento se propuso el nombre de Marcelino Reyes para reemplazar a la saliente".
Oquenday aclaró que se acordó consensuar, en una nueva asamblea, qué persona ocupará este curul; por este motivo, aseguró que solicitará un informe del motivo por el que se pidió que Reyes reemplace a Velásquez.
El dirigente del pueblo tapiete, José Luis Ferreira, se limitó a resumir la acción del pueblo guaraní en una frase: "el pueblo lo pone y el pueblo lo saca". Añadió que cada zona con sus representantes toma sus decisiones y que como consejo las respetan.
La política se interpuso en las demandas indígenas
Según los representantes de los tres pueblos indígenas, el descontento radica primero en la poca atención a sus demandas por parte de la Asamblea Regional y la Asamblea Departamental, y el segundo punto se centra en el poco trabajo de sus representantes, quienes se habrían dejado llevar por la pugna política de estas entidades.
El capitán grande del pueblo weenhayek, Moisés Sapiranda, aseguró que ante la falta de información sobre los proyectos y leyes a favor de los pueblos, se tomó la determinación de las revocatorias.
Explicó que si bien los guaraníes, weenhayeks y tapietes tienen representación legislativa en la Asamblea Regional como en la Departamental, "lastimosamente los temas se manejan entre las mayorías". "Somos minoría, tenemos a nuestro representante en la Asamblea Regional y Departamental, pero no es suficiente ya que no hay un adelanto dentro de los proyectos y leyes", dijo.
El representante indígena Rubén Aparicio dijo que los asambleístas Justino Zambrana, Vicente Ferreira y antes Antonio Tato, en las elecciones de 2010, llegaron a ser legisladores por usos y costumbres, sin embargo, resaltó que hoy los pueblos originarios están molestos porque los representantes indígenas habrían hecho acuerdos y alianzas con la bancada de Camino al Cambio (CC), acción que la califican de "contraria a los pueblos originarios".
Cero proyectos y leyes a favor de los indígenas
Sapiranda aseguró que fueron dejados de lado en sus solicitudes, por lo que recordó la propuesta sobre las regalías del Chaco en la que pidieron un 15 por ciento de lo que corresponde a esta región. Dijo que esta propuesta fue presentada en la Asamblea Regional y fue dada a conocer en la Asamblea Departamental, "sin mayores resultados." "El presidente de las Asamblea Regional rechazó nuestra propuesta, el doctor Raúl Mansilla tomó una actitud con los policías para no dejarnos ingresar y presentar nuestras propuestas", lamentó.
Aseguró que no se mantuvieron los compromisos y no se avanzó en sus proyectos, y añadió que esperan la adecuación del Estatuto Autonómico para reclamar sus derechos e insertarlos en el documento.
El presidente del Consejo de Capitanías Guaraníes de Tarija, Tomás Ararai, manifestó que es grande la necesidad de realizar mejoras en las condiciones de vida que tienen las familias indígenas en Villa Montes, Yacuiba y Caraparí.
Explicó que es urgente generar una agenda de trabajo con compromisos tanto de las autoridades zonales como de los asambleístas, acción que no se hizo. "No sólo es pedir sino gestionar en conjunto para el bien de cada una de las comunidades", manifestó.
Sobre la situación, la asambleísta María Lourdes Vaca (CC) se limitó a expresar que los representantes indígenas no promovieron más que leyes declarativas que no coadyuvan al desarrollo de sus pueblos. "Pese a que tienen una Dirección de Pueblos Indígenas en la estructura de la Gobernación, no promovieron el desarrollo de su pueblo", dijo. Añadió que incluso estando a la cabeza el asambleísta indígena Justino Zambrana, estos pueblos no cumplieron sus objetivos.
Según analista, "no hubo capacidad de gestión"
El analista político Iván Arias explicó que lo que pasó con la población indígena es que se pensó que ellos podrían hacer una especie de territorio libre, independiente y soberano; "pero a la hora de la verdad se dieron cuenta que no estaban libres de someterse a la Constitución". En su opinión, esto generó que las autoridades indígenas estén muy limitadas y mediatizadas por lo que establece la Carta Magna, dándose de esa manera una especie de bajón y desilusión sobre aquella demanda.
Se le consultó al analista su opinión sobre si se habrían dado mejoras en la calidad de vida de los pueblos indígenas a partir de tener representación en la Asamblea Legislativa Departamental y Regional, y éste añadió que este aspecto es difícil de analizar, sin embargo, respondió que "los municipios que pasaron a ser municipios indígenas, no mejoraron su calidad de vida porque no es un problema de nombre sino de gestión, es un problema de capacidad de gasto y capacidad técnica". Añadió que los niveles de ejecución son bajos y sus capacidades de generar desarrollo son "tan malas" como cualquier otro municipio.
Cuatro asambleístas indígenas ya fueron revocados
La primera revocatoria indígena por "usos y costumbres" sucedió en pasados meses cuando el pueblo weenhayek del departamento de Tarija, de manera sorpresiva, procedió a revocar el mandato del asambleísta regional Damael López, y luego eligió al exdiputado nacional Federico Salazar como nuevo asambleísta regional en el Chaco tarijeño.
El segundo asambleísta en perder su curul fue el indígena Antonio Tato, quien fue revocado por solicitud de la Organización de Capitanías Weenhayek de Tarija (Orcaweta), misma que se basó en sus "usos y costumbres" para enviar la solicitud. En su reemplazo entró Oswaldo López.
El tercer asambleísta revocado fue Roberto Corema, quien fue destituido de la Asamblea Regional porque el mismo no habría cumplido con las tareas encomendadas por el pueblo tapiete; en su reemplazo fue elegido José Luís Ferreira Corema, hermano del asambleísta Vicente Ferreira.
La cuarta asambleísta revocada en recientes días fue Patricia Tato, en su reemplazo ingresó su hermana, Cresencia Tato.
Usos y costumbres
La antes Corte Nacional Electoral estableció que la elección de los representantes indígenas debe llevarse siguiendo las propias normas y procedimientos (usos y costumbres) de las comunidades, ayllus o capitanías.
En los pueblos indígenas, cada capitanía, comité o subcentral emite una convocatoria para elecciones internas. La primera selección de los candidatos a asambleístas indígenas departamentales se hace generalmente por aclamación. La revocatoria, por lo general, se realiza mediante la evaluación de sus representantes en un ampliado en el cual se saca una resolución firmada por las máximas autoridades indígenas.
[Fuente: El País, Tarija, 23may13]
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