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02ago15
Amalia Pando deja Erbol y denuncia presiones del Gobierno
Amalia Pando, una de las periodistas más influyentes del país, anunció la semana pasada que renunciará el 31 de agosto a su cargo de conductora de un programa noticioso que lidera desde hace más de diez años en radio Erbol. La noticia causó una conmoción en el ámbito mediático.
Al diario El Deber le explicó las razones de esa renuncia, que se pueden resumir en una frase: los hace para salvar a su medio de comunicación. Afirmó que radio Erbol está asfixiada económicamente y que su salida podría ayudar a que lleguen ingresos por publicidad estatal y privada. Y explicó que incluso empresas privadas, como bancos, se inhiben de entregar publicidad a su radio para evitar problemas con el gobierno.
"(Renuncio) porque quiero facilitar la posibilidad de que Erbol no se hunda económicamente. Siento que estamos con el agua en el cuello y un poco más arriba. Quiero alivianar la carga de este barco. Sé que el gobierno ha pedido mi cabeza reiteradamente y entonces se la entrego. A ver si así se salva Erbol, que yo creo que es un instrumento de comunicación indispensable en este periodo y en cualquier otro", dijo entrevistada por Mónica Salvatierra, de El Deber.
Haraquiri para salvar al gobierno Recordó que su radio tiene 48 años de vigencia y que se está "ahogando financieramente porque el gobierno confunde la publicidad con la compra de conciencias". "Cometo un haraquiri para ver si salvo el proyecto", dijo.
Pando usa un estilo directo, informado, apasionado para hacer radio. Fue crítica de gobiernos anteriores, especialmente del segundo de Gonzalo Sánchez de Lozada. Con 35 años de experiencia, es una premiada y apreciada periodista boliviana, conocida también por su paso por la televisión, en distintos canales, como PAT, del que fue fundadora y socia, además de Cadena A y de haber sido productora independiente en un programa que se transmitió por el canal estatal bajo el gobierno del MAS.
Tras haber sido simpatizante del régimen actual, Pando se alejó paulatinamente y llegó a ser una de las líderes de opinión más críticas con el oficialismo. En un ambiente de reducción de medios independientes y, por tanto, con una cantidad cada vez mayor de medios proclives al oficialismo, ya sea porque han sido comprados por empresarios proclives al gobierno o cooptados por la publicidad estatal, la renuncia de Pando ha sido lamentada en las redes sociales por quienes no comulgan por el gobierno actual.
No es una inmolación
Consultada sobre si en Erbol le sugirieron que renuncie, dijo que "de ningún modo" y agregó que "no se está inmolando" ni que es una víctima. "Es la factura que uno paga", agregó. "Y una sabe que se tiene que pagar una factura cuando se toma una posición política. Y yo la tomé", agregó a El Deber.
ANF intentó la semana pasada obtener del director de Erbol, Augusto Peña, una opinión al respecto, pero éste prefirió no hacer declaraciones. En una nota de prensa de esa radio, colocada en su portal web, se afirmaba que no estaba informado, pese a que el rumor sobre su salida fue insistente en los últimos meses.
"Hago un periodismo militante y soy solidaria con Potosí, soy solidaria con el TIPNIS y ese ha sido mi pecado y el de Erbol porque había una línea editorial conjunta, que no sé si con mi salida cambie. El TIPNIS marcó un antes y un después. Esta es la factura. Me estoy retirando en un gesto desesperado, a ver si con esto el gobierno tiene una actitud algo más democrática con Erbol", agregó.
Contó que otras fuentes de financiamiento se han ido cerrando para Erbol en los últimos años. Por ejemplo, contó, aunque sin mencionar el nombre, que la ONG IBIS Dinamarca apoyaba a Erbol publicitariamente, pero que ello concluyó cuando esa entidad fue expulsada del país. También dijo que el "banco que me da cinco premios en el año como mejor conductora" (banco BISA, NdE), "cuando voy a buscar publicidad, no me la dan porque todos sabemos que si me la dan, inmediatamente el gobierno los llama".
En ese sentido, explicó, "el Gobierno no ha mandado a clausurar Erbol con militares, pero lo está haciendo por la vía de la asfixia económica. Eso no es acoso, esto es una asfixia económica para matar a un medio de comunicación". Agregó que "un medio no puede solito con un Estado. Si retirándome ayudo en algo, pues me retiro, porque no se trata de un tema individual, sino de una institución muy importante para el país".
[Fuente: Página Siete, La Paz, 02ago15]
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