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08jun10


Gobierno boliviano garantiza investigación sobre linchamiento de cuartro policías


El ministro boliviano de Gobierno, Sacha Llorenti, garantizó este lunes la realización de una minuciosa investigación para sancionar a los responsables del linchamiento de cuatro policías en los sectores indígenas de Saca Saca y Cala Cala, en el departamento de Potosí (suroeste).

"Se tiene que investigar (...) las muertes de estos policías, pero al mismo tiempo se tiene que investigar, con la misma rigurosidad, qué es lo que estos policías hacían en esa zona", dijo el ministro a los medios de comunicación.

Después de la prolongada negociación, los ayllus de Saca Saca y Cala Cala, al norte de Potosí, hicieron la entrega el pasado viernes de los cuerpos de los cuatro efectivos policiales, adscritos a la Dirección de Prevención de Robo de Vehículos (Diprove), ejecutados en circunstancias todavía no aclaradas.

Según informes preliminares, los policías fueron ajusticiados el 23 de mayo y los cadáveres de Nelson Alcócer, Miguel Ramos, Rubén Cruz y Esteban Alave, fueron enterrados el pasado sábado en la ciudad de Oruro.

Los comunarios de los ayllus Saca Saca y Cala Cala lincharon a los cuatro policías, según las autoridades. Después del entierro, los manifestantes culparon al Gobierno boliviano de la acción y se dirigieron a la casa de la hermana del presidente, Evo Morales, y la apedrearon.

El Gobierno "podía rescatarlo, a mí esposo recién lo han matado hace tres días, no tiene nada de descomposición", reclamó la esposa de uno de los policías ajusticiados en Uncía, que presuntamente falleció de tres a cinco días antes de la recuperación del cadáver.

Respecto a este asesinato, Llorenti consideró que las investigaciones precisarán si, efectivamente, son contundentes los informes de la autopsia. Al parecer el efectivo murió cuando el Ejecutivo negociaba la entrega de los cuerpos, cuando se suponía que todos habían perecido el mismo día.

"El fiscal del distrito de Potosí (Sandro Fuertes), que está encabezando las investigaciones, ha cuestionado ese informe forense", indicó el ministro de Gobierno boliviano.

Apedrearon vivienda de hermana del Presidente

Tras los funerales de los cuatro policías en Oruro, los manifestantes responsabilizaron al Gobierno de la masacre y se desplazaron hasta la casa de la hermana del presidente de la República, Esther Morales.

"Oruro está de duelo por culpa del Gobierno", gritaban los orureños el pasado sábado en el entierro de los cuatro policías de Diprove.

En el cementerio los acompañantes pidieron la renuncia del comandante de la Policía Mario Hinojosa, mientras que otros asistentes pedían la dimisión del presidente Evo Morales.

Más tarde, decenas de personas protestaron en rechazo al Gobierno y un grupo rompió a pedradas todos los vidrios de la vivienda de Esther Morales.

Por su parte, el ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, aseguró que personas con intereses políticos partidarios fueron quienes iniciaron la movilización, aprovechándose del dolor de las familias de las víctimas.

"Es inadmisible que se de una situación de esa naturaleza. Entendemos que alguna gente está aprovechándose del dolor de las familias para organizar otro tipo de movilizaciones con afanes estrictamente político partidarios", sostuvo.

"Han provocado sólo daños materiales a la vivienda de la hermana del Presidente, estos son delitos de acción pública y van a ser investigados", advirtió Llorenti.

[Fuente: Telesur, Caracas, 08jun10]

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