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11nov21


Cambian a comandantes y ascienden a tres coroneles leales en medio de violencia


Los jefes de los Comandos de Tarija, Potosí, Oruro, Chuquisaca y Santa Cruz fueron cambiados. La institución policial es acusada de abusos y complicidad con grupos irregulares.

El gobierno de Luis Arce relevó del cargo a cinco comandantes departamentales de la Policía y ascendió a tres coroneles leales al grado de general, entre ellos Jhonny Aguilera, en medio de la violencia y malestar con la institución policial, acusada de abusos y complicidad con grupos irregulares que agredieron a diferentes sectores, durante los conflictos por el paro nacional que exige la abrogación de la Ley 1386 contra Legitimación de Ganancias Ilícitas.

Los jefes de los Comandos de Tarija, Potosí, Oruro, Chuquisaca y Santa Cruz fueron cambiados y se anunciaron más relevos en el resto de los departamentos. En cambio, Aguilera fue ratificado como comandante de la Policía Boliviana; Orlando Ponce, subcomandante y jefe de Estado Mayor; y Álvaro Álvarez, inspector general de la institución; los tres ascendieron al grado de general.

“A los nuevos generales les encomiendo la digna e histórica tarea de defender la democracia en nuestro país y de regirse siempre bajo los preceptos y los pilares más elementales que están plasmados en nuestra Constitución”, pidió Arce a los oficiales ascendidos.

Tras el ascenso, el comandante dijo que la nueva visión de la Policía está orientada a la prevención y protección de la población. “Me disculpo si a lo largo de nuestra carrera he generado sinsabores o malos momentos”, indicó.

Aguilera y Ponce fueron cuestionados por la represión policial a la población que protesta contra normas impulsadas por Arce y por proteger a grupos de choque del Movimiento Al Socialismo (MAS). También fueron criticados por no desarticular grupos armados vinculados al MAS.

Efectivos cuestionaron a Aguilera por llevar a la Policía a una desinstitucionalización a causa de la politización. “A la población pedirles perdón por la confrontación que se está teniendo en estos días con las marchas; son algunos llunku’s generales y comandantes departamentales elegidos a dedo por el Gobierno masista, quienes obligan y sacan a nuestros camaradas y ordenan a reprimir al pueblo”, refirió uno de ellos, que pidió mantener su nombre en el anonimato.

La Policía fue criticada porque en los días de paro incurrió en abusos y atropellos contra la población movilizada en Santa Cruz, Tarija, Potosí y Oruro. Los efectivos fueron acusados de apuntar con un arma a un menor, operar junto a grupos irregulares, agredir a periodistas y a los movilizados.

“Han premiado a los comandantes que han atropellado a los bolivianos en las calles. Aquí no importa la capacidad o el compromiso con su pueblo, aquí hay que ser chupamedias y lambiscón”, dijo Rómulo Calvo, presidente del Comité Pro Santa Cruz.

La diputada Luisa Nayar, de Comunidad Ciudadana (CC), calificó de vergonzoso que se premie con el ascenso a Aguilera, de quien dijo que no merece ser comandante porque se dedica a reprimir a la población y a “lavarse las manos de los hechos de violencia generados por la Policía”.

La Misión en Bolivia de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y Human Rights Watch también cuestionaron a los uniformados por las represiones en distintas regiones del país, donde varias personas resultaron heridas, hubo un fallecido y cientos de detenidos. Llamaron a solucionar el conflicto por la vía del diálogo.

Por su parte, el Secretariado Internacional de Amnistía Internacional se pronunció sobre la represión policial en Bolivia y recordó a la Policía: “El uso de la fuerza debe ser necesario, legal y proporcional. Estándares internacionales prohíben disparar gas lacrimógeno directamente contra personas. Deben asegurar la seguridad de periodistas”.

Piden renuncia de Del Castillo

Parlamentarios de oposición apuntaron al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, por los ataques a los cívicos con uso de vehículos incautados al narcotráfico y avalar a grupos irregulares en el país. Pidieron su destitución.

“La Policía está en complicidad con grupos irregulares que el Gobierno está fomentando. El viceministro Cox es un mentiroso. El ministro Murillín, éste Del Castillo, es otro mentiroso, y están alentando la confrontación”, dijo José Gutiérrez, diputado de Creemos.

El alcalde de La Paz, Iván Arias, exigió al Gobierno pedir perdón a Potosí por la persona fallecida en los conflictos y destituir a Del Castillo y al viceministro de Régimen Interior, Nelson Cox, a quien calificó como “viceministro del odio”. Asimismo, la alcaldesa de El Alto, Eva Copa, pidió a Del Castillo no “copiar el mal ejemplo de Arturo Murillo; el señor Murillo nos amenazaba así, nos mostraba las manillas para llevarnos a la cárcel”.

Cambio en la Policía

Comandos: La Policía dispuso cambios en los comandos departamentales: Víctor Velásquez es el nuevo comandante en Tarija, Roque Arraya en Oruro, Bernardo Isnado en Potosí, Marco Gutiérrez en Chuquisaca y Orlando Ponce dejó de ser el jefe de la Policía de Santa Cruz, debido a que pasará a formar parte del alto mando policial por su ascenso a general; su lugar es ocupado de manera interina por el subcomandante Marcero Flores. Preliminarmente se conoce que también habrá cambios en las otras regiones.

[Fuente: Por Luis Callisaya, Página Siete, La Paz, 11nov21]

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