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09jun11
“Papelitos cantan”: autoridades debaten a puerta cerrada sobre Margarita desde el 2009
Una carta firmada por el secretario de Hidrocarburos de la Gobernación, Dino Beltrán, con fecha 29 de marzo de 2011, da cuenta exacta de que la autoridad departamental se reunió, coordinó y conoció la situación exacta del Campo Margarita y su conectividad con el campo Huacaya. Beltrán, sin embargo, negó reiteradamente conocer el asunto. Cuando en días pasados se puso en duda la veracidad de sus declaraciones públicas, intentó relativizar su posición afirmando que los estudios que conoció eran sólo “referenciales” y no oficiales. Similar actuación respecto del Campo Margarita se observó en autoridades de la gestión de Mario Cossío. “Papelitos” conocidos luego, confirmaron que éste ya negoció desde el año 2009 con autoridades nacionales del sector energético las tareas necesarias para determinar el Factor de Distribución de regalías con Chuquisaca.
¿Mienten las autoridades? ¿Porque lo hacen? Las dudas crecen cuando los “papelitos cantan” desmintiendo sus versiones públicas y declaraciones.
Así dan cuenta una serie de cartas y notas, que salieron y llegaron a la principal institución pública del departamento. Misivas que eran de conocimiento del ex gobernador Cossío y que ahora lo son de funcionarios de confianza de Lino Condori, como el secretario de Hidrocarburos y Energía, Dino Beltrán.
Pero como si fuera un patrón de comportamiento obligatorio cuando se trata de asuntos energéticos, las autoridades tienen la extraña actitud de ocultar la información y hasta de negar que la conocen.
En efecto, pese a la insistencia de asambleístas nacionales, departamentales, cívicos, autoridades regionales y los mismos medios de comunicación, tanto Cossío, como Beltrán, negaron conocer los informes en torno a la condición de campo compartido en el caso de Margarita y ahora, según se reveló, el hecho de que éste en realidad sería parte de un sólo reservorio ubicado entre Tarija y Chuquisaca en el bloque Caipipendi, operado por Repsol YPF.
“Papelitos cantan”. Esa es la manida frase utilizada por los políticos cuando quieren demostrar o encarar alguna situación irregular. Es lo que pasa con el caso Margarita. Filtraciones, llamadas anónimas, sobre cerrados y hasta fuentes que piden reserva de nombre han permitido a la prensa tarijeña publicar información no desmentida que permitió conocer que durante la gestión de Cossío ya se habló y coordinó oficialmente tareas técnicas que permitan confirmar o descartar la condición de campo compartido de Margarita y la determinación del factor de distribución entre Tarija y Chuquisaca.
Las negociaciones y gestiones oficiales involucraron a autoridades de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), el Ministerio de Hidrocarburos e incluso con las autoridades de Chuquisaca y Tarija.
En el caso de Mario Cossío, desde el 14 de mayo de 2009, la ex autoridad acordó una serie de reuniones con la ex prefecta de Chuquisaca, Sabina Cuellar, para debatir sobre la delimitación del megacampo Margarita. En aquel entonces, ambas autoridades basaban sus reuniones en los informes de la empresa Ryder Scott, en el que se certificaba que los predios donde está ubicado el campo Margarita eran de Chuquisaca. Por lo tanto la distribución de regalías correspondía en 17.23 por ciento a Chuquisaca y el 82.77 por ciento para Tarija.
Pero pese a que existían las cartas que probaban que si hubo reuniones entre Cuellar y Cossío por el campo Margarita, los ex funcionarios y responsables del área hidrocarburos de esa gestión, negaron el tema.
Con los actuales funcionarios pasa lo mismo. Nadie da a conocer con veracidad qué información conocen sobre los estudios del campo Margarita.
Ese es el caso del secretario de Hidrocarburos y Energía, Dino Beltrán, quien negó reiteradamente conocer el estudio entregado por la empresa Repsol YPF.
Sin embargo ayer salió a la luz pública una nota fechada el 3 de febrero de 2011, donde se hizo conocer oficialmente el contenido de un informe técnico de Repsol YPF sobre la conectividad de los campos Margarita y Huacaya.
La nota fue enviada al gobernador, Lino Condori, pero Beltrán aseguró que el informe jamás llegó a la Gobernación de Tarija. Finalmente, el 4 junio admitió que sí conocía el informe, pero no explicó porqué negó el hecho anteriormente. Beltrán intentó relativizar el asunto afirmando que el estudio es sólo “una referencia”.
Pero las cartas siguen “yendo y viniendo”, y una vez se demuestra que Beltrán sí se reunió con autoridades del Gobierno para hablar sobre la conectividad que existe entre Margarita y Huacaya.
Hoy es la reveladora carta de 29 de marzo de 2011. Está firmada nada menos que por el Secretario Dino Beltrán y la dirige al mismísimo Gobernador de Tarija, Lino Condori.
“Luego de sostener reuniones con el Ministerio de Hidrocarburos y el Presidente de la estatal petrolera YPFB, en relación a la determinación de reservas departamentales del campo Margarita, y las bases técnicas y legales para la distribución departamental de regalías, asimismo delinear el mecanismo para la contratación de la Empresa que realizará el Estudio de verificación si existen reservorios compartidos y si corresponde el cálculo del Factor de Distribución (FD) de los campos Margarita y Huacaya, ambos ubicados en el área Caipipendi de los departamentos de Tarija y Chuquisaca, así también definir la nominación de los comisionados para el seguimiento y la supervisión del proceso de la contratación y de los estudios mencionados”, dice la misiva, dejando en claro que Beltrán sí conocía todos los trámites que se están haciendo en torno al reservorio de gas.
En la misma carta, Beltrán pide a Condori, curse una invitación a la Asamblea Legislativa, Ejecutivos Seccionales, Comité Cívico y Universidad Juan Misael Saracho, con el objetivo de que puedan hacer las observaciones y complementaciones a los Términos de Referencia, que servirán de base para la contratación de la empresa internacional que realizará el estudio técnico.
Asimismo pide que esas instituciones nombren a un representante técnico para que puedan formar parte de la Comisión que realizará la fiscalización y el seguimiento de todo el proceso de contratación y el desarrollo del estudio.
“El plazo de entrega será de siete días hábiles a partir de la fecha. Se adjunta los Términos de Referencia y el Alcance Técnico”, finaliza la nota firmada por el secretario de Hidrocarburos y Energía de la Gobernación.
En el nivel nacional ocurre algo similar y más grave aún. Hasta hoy, las auditorías petroleras efectuadas por el Ministerio de Hidrocarburos entre los años 2006 y 2007, nadie las conoce. Sus resultados son secreto de Estado. El responsable de su elaboración, el desaparecido Enrique Mariaca Bilbao, denunció el ocultamiento y reveló que las auditorías descubrieron fraudes contables y mala práctica de explotación de hidrocarburos de varias transnacionales.
Durante el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada se firmaron contratos de riesgo compartido con cláusulas de confidencialidad. Luego se supo que, en aplicación de ese secreto admitido (Anexo D), las petroleras pagaban jugosos sueldos a periodistas y autoridades del sector que debían fiscalizarlas. El secreto parece ser una condición del multimillonario negocio petrolero. ¿Todo en familia?
[Fuente: El Nacional, Tarija, 09jun11]
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