Información | ||
Derechos | Equipo Nizkor
|
14jun17
Bolivia denuncia ante la OEA tortura a bolivianos en Chile; pide actuar para su liberación
Bolivia denunció este miércoles ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) acciones de tortura cometidas por policías de Chile en contra de los nueve agentes aduaneros bolivianos capturados el 19 de marzo en la frontera y demandó su liberación por medio de la vía diplomática.
"Hoy acudimos a la organización para poner en conocimiento de los países miembros y denunciar ante la comunidad internacional la injusta detención de nueve ciudadanos bolivianos", señaló el canciller Fernando Huanacuni ante el consejo permanente de esa organización, reunido con caráctar extraordinario pasadas las 10.00, hora boliviana.
"Al promediar las 14.00 del mismo día, los nueve funcionarios bolivianos fueron detenidos arbitraria e ilegalmente por Carabineros de Chile bajo hostigamiento y agresión con uso excesivo de violencia e incluyendo disparo de amedrentamiento con serios indicios de tortura", añadió.
El jefe de la diplomacia boliviana compareció ante el pleno del organismo internacional junto con el ministro de Justicia, Héctor Arce, quien se encargó de explicar los fundamentos del reclamo.
"Esta organización criminal transnacional, al advertir el operativo de control que realizaba la fuerza aduanera boliviana dio aviso a Carabineros de Chile, quienes en lugar de colaborar a la fuerza regular boliviana como era lógico, detuvieron violentamente a los nueve servidores del estado boliviano", dijo Arce.
El titular de Justicia aseguró que "el Gobierno de Chile, motivado por actos de discriminación fundados en razón de nacionalidad, violando los derechos y garantías más fundamentales para los seres humanos y, especialmente, desconociendo el principio de reciprocidad y cortesía internacional, en lugar de cooperar con las autoridades bolivianas en la lucha contra el contrabando, brindó apoyo y conestó con los contrabandistas".
Relató los pormenores de los sucesos que acontecieron ese día en la frontera y citó las declaraciones de dos de los funcionarios que recientemente se divulgaron en una comparecencia de cuatro de los nueve servidores ante la Fiscalía de Chile, como ejemplo de la "brutalidad" de la detención.
David Quenallata Laurel, uno de los funcionarios detenidos, reveló ante las autoridades chilenas que los policía chilenos no oyeron sus argumentos pese a que mostró su identificación y el uniforme que tenía logotipos de la Aduana Boliviana.
"Proceden a increparme y encañonarme, me reducen al piso en ese momento yo le indico a las persona que somos funcionarios de Aduanas y que estamos en territorio boliviano (…) ellos hacen caso omiso de la información y me dicen: 'No me mires, no me mires porque te voy a matar'", contó Quenallata, según citó Arce.
El ministro apuntó que los uniformados chilenos "los amenazan de muerte directamente en las imágenes que acabamos de ver". Durante su explicación se expusieron fotografías en el foro de la detención y a las heridas y magulladuras de tres de los bolivianos.
Asimismo, el suboficial del Ejército boliviano, Carlos Hugo Solís, quien era parte del contingente anticontrabando, declaró que los Carabineros los "redujeron violentamente, estaban con armas y las dispararon a la izquierda y a la derecha de nosotros. Luego que nos redujeron las personas civiles que estaban en lugar golpearon a algunos de nosotros y todo ello en presencia de Carabineros, quienes no hicieron nada".
"Como pueden comprobarse, los funcionarios injustamente detenidos, fueron lacerados, golpeados, vejados y reducidos de la manera más cruel e inhumana que no puede ser admitida en ninguna circunstancia", dijo Arce a tiempo de asegurar la fuerza policial chilena y los contrabandistas "que por inconcebible que parezca, actuaron conjunta y coordinadamente contra las fuerzas contra las fuerzas regulares de un Estado".
A manera de conclusión, reiteró que los hechos expuestos ante el foro internacional "demuestran odio y discriminación en contra de ciudadanos bolivianos" y anticipó que Bolivia, pese al incierto desenlace, no cesará en denunciar esos hechos y que Chile violó e ignoró el Derecho Internacional en este caso.
No obstante, "Bolivia invita una vez más a Chile a entablar un diálogo abierto y sincero" para resolver el asunto por la vía diplomática, "la única vía posible para resolver este tipo de incidentes", dijo la autoridad boliviana, quien demandó a Chile el cumplimiento de su obligación referida en el artículo 24 de la Carta de la OEA que reivindica la "solución pacífica" de las controversias.
Todo esto fue negado por Chile, cuyo representante, el embajador Juan Aníbal Barría, demandó réplica en el foro y aseguró que a su país no le causa sorpresa la postura boliviana.
"Estamos ante una actuación de Bolivia, inconsistente y sin ninguna credibilidad. La OEA no puede ser la caja de resonancia de reclamaciones individuales. (…) Chile se pregunta qué credibilidad puede tener un gobierno que invita al diálogo pero insulta a nuestras autoridades, que difunde falsedades como aquellas referidas a las condiciones en que fueron aprehendidos los nueve ciudadanos bolivianos", cuestionó el diplomático chileno.
Arce, en una inédita dúplica le cuestionaría mirándole a la cara: "¿Son falsas esa imágenes? ¿Es necesario encañonar a los oficiales del Ejército de un país amigo cuando están en un incidente de frontera? (…) ¿Es necesario tirarlos al suelo, ponerles la boca contra el piso, cargas las armas de fuego, disparar a su derecha y a su izquierda? ¿Eso es respetar los derechos de las personas?, ¿eso es respetar a un Gobierno vecino? (…) ¿Era necesario del uso de esa violencia?".
"Bolivia no está en guerra con Chile, Bolivia no quiere guerra con Chile", remarcó Arce, quien dijo que la OEA se creó justamente para resolver este tipo de asuntos.
[Fuente: La Razón, La Paz, 14jun17]
This document has been published on 15Jun17 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |