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23ene11


Evo desoye pedidos de cambio de gabinete; nombra sólo tres nuevos ministros


El presidente Evo Morales ratificó el domingo a la mayoría de sus ministros, para desazón de algunos sectores sociales que habían pedido un golpe de timón con la eventual renovación del equipo de colaboradores. Los argumentos de esa demanda se sustentaban en una débil gestión ante el alza de precios de los alimentos y el fallido "gasolinazo" que ahondó el problema.

De los 20 ministros, 17 continuarán en sus cargos y tres se han sumado al entorno que no ha variado en su proporcionalidad de género, diez a diez.

Cuando se presumía que iba a haber un cambio del gabinete presidencial, incluso con el retorno de algunos "históricos" (Juan Ramón Quintana y Wálker San Miguel), el Mandatario sorprendió con la nominación de solamente tres nuevas autoridades: José Luis Gutiérrez en el Ministerio de Hidrocarburos (en vez de Fernando Vincenti), Ana Teresa Morales Olivera en Desarrollo Productivo (reemplaza a Antonia Rodríguez) y Julieta Monje Villa en Medio Ambiente y Agua (por María Luisa Udaeta).

El resto fue ratificado, a pesar de una primera lista filtrada la semana en la que se hablaba de la inamovilidad de al menos cuatro ministros, considerados indispensables. Así, el entorno más cercano de Morales se complementa con David Choquehuanca (Relaciones Exteriores), Óscar Coca (Presidencia), Sacha Llorenti (Gobierno), Rubén Saavedra (Defensa), Elizabeth Arismendi (Defensa Legal del Estado), Viviana Caro (Planificación del Desarrollo), Luis Arce (Economía y Finanzas), Wálter Delgadillo (Obras Públicas), José Pimentel (Minería), Nilda Copa (Justicia), Carmen Trujillo (Trabajo), Nila Heredia (Salud y Deportes), Roberto Aguilar (Educación), Nemesia Achacollo (Desarrollo Rural), Carlos Romero (Autonomías), Nardi Suxo (Transparencia) y Zulma Yugar (Culturas).

En su discurso de posesión, Morales pidió a sus ministros mayor entrega, incluso con el sacrificio de resignar la atención de sus familias a favor de la "familiar grande", como llamó al país. "Cuando un ministro o una ministra me dice 'Presidente, yo tengo una familia'. Por supuesto que todos tienen familia, pero para quienes prestamos un servicio al Estado la primera es la familia grande, Bolivia. Y cuando un ministro me dice 'tengo problemas de salud', me insinúa retirarse o irse al hospital. No entiendo a qué se debe esa insinuación. Si quiere mejorar su salud, puede hacerlo trabajando. Perdonen si soy muy atrevido, si está tan mal de salud yo voy a recogerlo en ataúd del Ministerio", bromeó el gobernante.

Como tarea esencial para el equipo económico, el Presidente del Estado encomendó reducir las asimetrías entre las familias bolivianas, por la necesidad de "resultados que quiere el pueblo". Así, prometió para este año una inversión de 3.300 millones de dólares en obras públicas, dinero que, según dijo, se encontraban en arcas del Estado desde 1825.

¿Cómo mejorar la economía?, se preguntó. Propuso al Ministro de Economía mejorar las recaudaciones tributarias a través de la promoción de la cultura tributaria entre los ciudadanos. "Compañeros, sepan pagar su impuestos y exijan factura", recomendó.

También planteó la necesidad de incrementar el valor agregado a la producción de hidrocarburos y productos agrícolas. A su nueva ministra Morales Olivera le pidió "ampliar la frontera agrícola en el país" y echar a andar la Empresa Azucarera San Buenaventura; a Monje Villa "agua, agua, agua", y a Gutiérrez Pérez, industrialización de los hidrocarburos.

Morales mostró cierta autocrítica en relación a su mensaje-informe del sábado. "Tenemos que aprender de nuestros errores", dijo.

Sin embargo, más contundente fue el canciller Choquehuanca, que habló a nombre de sus colegas. Hemos tenidos tropiezos, los errores han sido nuestros, tenemos que "despojarnos de cualquier actitud individualista, egoísta y utilitarista", desafió.

También demandó de sus compañeros del gabinete luchar contra la corrupción y el "burocratismo".

Algunos sectores sociales que asistieron al Palacio de Gobierno, cuyos representantes eran solo intermedios, resignaron el incumplimiento de su demanda de renovación del gabinete. Entre ellos se encontraban mineros y campesinos, menos indígenas y originarios de oriente y occidente del país.

Sin embargo, la secretaria general de la Confederación de Mujeres Campesinas "Bartolina Sisa", Felipa Huanca, dijo a Erbol que el Presidente sabe por qué ha ratificado al algunos ministros cuestionados". Entre ellos citó a Achacollo, Heredia y Lllorenti.

La dirigente consideró que hay que darles tiempo a esas autoridades para que respondan a las demandas de la población. Vamos a hacerle seguimiento, prometió.

El gabinete del primer año del segundo Gobierno de Morales fue cuestionado por su debilidad en la lucha contra la escasez y precios altos de los alimentos, ahornado más con la emisión del Decreto Supremo 748, que entre el 26 y 30 de diciembre subió los precios de la gasolina y el diesel en casi el 80 por ciento.

Hasta hace unas horas, Gutiérrez, ingeniero químico con 22 años de experiencia en Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, fue viceministro de Industrialización, Transporte, Comercialización y Almacenaje de Hidrocarburos. Entretanto, Morales Olivera fue gerente del nuevo ingenio San Buenaventura; y Monje Villa, una líder en la ciudad de El Alto.

[Fuente: Erbol, La Paz, 23ene11]

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