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24jul08
Brufau dice que la relación de Repsol con Bolivia es de "amor apasionado y conflicto interesado"
El presidente de la petrolera Repsol-YPF, Antonio Brufau, afirmó ayer que la inestabilidad política existente en Bolivia hace que la negociación entre la empresa y el gobierno no sea un "tema fácil", aunque aseguró sentirse optimista por el curso de las conversaciones.
Si bien se mostró "optimista" acerca del futuro hidrocarburífero de Bolivia, considera que la situación inestable del país hace que las autoridades se centren en otras prioridades.
Estas declaraciones fueron formuladas durante los cursos de verano de la Universidad Rey Juan Carlos, donde Brufau participó en una conferencia del ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos.
El principal ejecutivo de la petrolera calificó la relación entre Repsol y el gobierno boliviano de "amor apasionado y conflicto interesado". Aseguró que la empresa negocia para poder "transformar lo que el gobierno quiere a la realidad práctica, que es permitir trabajar con estabilidad, con previsibilidad".
El gobierno decidió adquirir la mayoría de acciones en las empresas petroleras que pasaron a manos del sector privado durante la primera gestión de Gonzalo Sánchez de Lozada (1993-1997) incluida Andina, en la que Repsol tenía la mayoría de participación.
En este sentido, Evo Morales firmó un decreto en el que fijo el 30 de abril como fecha definitiva para tener el control del 50 por ciento más uno de las acciones de cuatro petroleras, Andina, Chaco (BP), Transredes (Ashmore) y la Compañía Logística de Hidrocarburos Boliviana.
La operación se realizó a través de la petrolera estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), pues el Estado contaba con el 48,92 por ciento de las acciones de Andina.
Fue precisamente Repsol la primera en lograr un arreglo con el Estado boliviano para transferir la mayoría de sus acciones y en la actualidad realizan una operación conjunta con YPFB en Andina.
El Presidente de Repsol-YPF señaló hace algunos días, que no tiene intención de salir de ningún país de Latinoamérica, en particular de Ecuador y Bolivia, y recalcó que solo se irían de países en los que no los quieren.
Respecto a Bolivia, Brufau explicó que el país "está en una fase de construcción nacional" y aunque reconoció que hubo problemas con la aplicación del decreto de la ley de nacionalización. "Llegamos a un acuerdo con el gobierno y el presidente Evo Morales y ahora se trata de continuar en esa aplicación".
[Fuente: El País, La Paz, Bol, 24jul08]
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