Equipo Nizkor - Racismo y epidemia.

A Don Bartolo, In Memoriam

En el día de ayer, 18 de julio de 2020, el Alcalde de Entre Ríos, Nicolás Herrera, junto con el agente de contrainteligencia Esteban Barrios, fueron a la Comunidad de Yuati sin aviso a las autoridades por usos y costumbres, con la intención de atacar a la APG IG y proponer la creación de una nueva Comunidad.

Hace unos días, el alcalde Nicolás Herrera y el Subgobernador Walter Ferrufino acusaron a los guaranís de haber traído el coronavirus a la localidad de Entre Ríos y amenazaron con "hacer detener" al Mburuvicha Guasu Never Barrientos y al médico contratado por la APG IG para atender la epidemia de Covid-19, en lo que puede ser considerado uno de los ataques racistas más graves sufridos por la APG IG.

Les acusaban de ocultar la situación de Bartolomé Gallardo, quien era un leal colaborador de la APG IG y que no trabajaba con Repsol Bolivia SA. Don Bartolo, como era conocido, fue internado el día 01 de julio en el hospital de Entre Ríos y fue dado de alta el día 02 de julio, luego de que diera negativo en un test de Covid-19 realizado por el mismo hospital y cuyo resultado se conoció ese mismo día.

La APG IG, con sus medios, lo trasladó a la Comunidad de Yuati, donde él estaba viviendo con varios de sus hijos.

Sin embargo, su estado se agravó en fechas posteriores y falleció en un viaje al hospital de Entre Ríos, adonde estaba siendo trasladado por su hijo Marino Gallardo. Luego de su fallecimiento se realizó una PCR post mortem que dio positivo.

A pesar de que la información clínica era pública, el alcalde Nicolás Herrera y el subgobernador Walter Ferrufino procedieron a acusar a Never Barrientos, Presidente de la APG IG, de haber ocultado el estado de don Bartolo Gallardo, y a Repsol Bolivia SA de no haberlo informado.

Never Barrientos no estaba en Entre Ríos, dado que se encuentra desde hace meses viviendo en una de las 36 comunidades y toda la actuación relacionada con la enfermedad y el deceso fue llevada directamente por su familia próxima. Repsol Bolivia SA no tenía relación alguna con Don Bartolo y, por lo tanto, no tenía por qué conocer la situación.

El programa del día 09 de julio de Radio Entrerriana, que tuvo un gran repercusión pública, dio información falsa y manipuló los hechos con la intención evidente de perjudicar a la APG IG y promover el estigma de que los guaranís eran portadores del virus. La situación fue tan tensa que la APG IG dio instrucciones a los 19 guaranís que estaban habitando la casa de su propiedad en la localidad de Entre Ríos de no salir bajo ningún concepto, dado que se había desatado una situación de violencia contra los guaraníes.

Para demostrar que los que vivían en esa casa eran guaraníes portadores del virus, procedieron a enviar una brigada encabezada por el Director del Hospital de Entre Ríos, quien realizó tests rápidos a todos los que allí se encontraban.

Las pruebas dieron negativo en todos los casos, ni siquiera hubo IgG, o sea, que ninguno de los guaranís había tenido el virus.

Nicolás Herrera y Walter Ferrufino llevan adelante una agresiva campaña contra la APG IG desde hace años. Esta campaña se ha recrudecido desde el momento en que la APG IG comenzó a distribuir material de protección a las comunidades, como ser Overoles, Guantes, Mascarillas N95 y otros elementos, en una campaña preventiva no sanitaria del Covid-19.

Esta estrategia ha sido puesta en marcha al interior de la APG IG desde febrero de 2020, cuando el virus aún no había llegado a Bolivia, lo que le ha permitido obtener recursos anticipándose a la crisis de demanda que provocó la epidemia.

Este ataque racista ha sido denunciado por los dirigientes guaranís sin que la prensa local refleje en modo alguno sus opiniones. Radio Entrerriana (99.5 FM) es una de las dos FM de Entre Ríos. La Entrerriana tiene una agenda racista y antiguaraní. La emisora es propiedad de una "gran familia" de Tarija que tiene tierras y está ligada al narcotráfico.

Nicolás Herrerra promovió y dirigió un intento de toma por la fuerza de la sede de la APG IG en Entre Ríos junto con la "tropa" de Walter Ferrufino, encabezada por los hermanos Hugo y Rene Arebayo; desde entonces, el directorio de la APG IG ha dejado la ciudad de Entre Ríos.

Abel Guzman Murgia
(M.A.S I.P.S.P)

Cecilia Gallardo Suruguay
(M.A.S I.P.S.P)

La intención de esta operación encabezada por Nicolás Herrera y Walter Ferrufino, Abel Guzmán Murgia, presidente de la Comisión de Energía e Hidrocarburos de la ALDT (Asamblea Legislativa Departamental de Tarija), Cecilia Gallardo Suruguay (Vicepresidenta de la misma Comisión) y otros, pretende producir divisiones al interior de la comunidades de la APG IG aprovechando la epidemia de Covid-19 como cobertura, en una maniobra brutalmente racista.

En este momento están moviendo su tropa encabezada por Hugo Arebayo, Santiago Camacho, Esteban Barrios, Efraín Delfín Orillo y Rosemary Riva, que aparecen como dirigentes chutos de la APG IG en documentos firmados por Cecilia Gallardo Suruguay, Vicepresidenta de la Comisión de Energía e Hidrocarburos de la ALDT.

Dicho de otra manera, la tal Cecilia Gallardo Sarugay quiere "legalizar" una tropa de delincuentes reconocidos, como dirigentes chutos de los guaranís de la TCO Itika Guasu, desconociendo las autoridades por usos y costumbres, el Estatuto de la APG IG y la propia CPE, como ya hicieran en 2014 en una ofensiva jurídica que provocó una gran daño a la APG IG. Daños económicos y sociales que aún no fueron revertidos.

Lo grave en este momento es que utilizan como herramienta de control político social la epidemia de Covid-19 y lo quieren hacer en un marco de irracionalidad racista que, en sus comportamientos, demuestra una maldad primitiva y ciertamente bestial.

20jul20

Racismo y epidemia

[Fuente: Radio Nizkor, Redacción central, Charleroi y Tarija, 20jul20]

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