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13may05
Conflicto entre Sin Tierra y latifundistas en Santa Cruz.
El gobierno boliviano enfrenta ahora la radicalización del Movimiento Sin Tierra (MST). Ayer, 12, tras una semana, los manifestantes decidieron liberar a 60 rehenes de un campamento en Los Yuquises, a 245 kilómetros al norte de Santa Cruz. Los Sin Tierra denuncian que sicarios contratados por los latifundistas del norte cruceño empezaron a destruir los sembradíos y atacar a los asentados, lo que provocó la detención de estos enviados por los terratenientes. Según agencias de noticias, la casi totalidad de la prensa de Santa Cruz pasó a satanizar el movimiento.
"Es un grupo subversivo, entrenado por extranjeros peruanos y argentinos", "pedimos la inmediata intervención del ejército (para que desaloje a los Sin tierra)", "hay que restablecer el orden y sacar a esos delincuentes; mientras (los del MST) estén allí corremos todos peligro"; "la gente (de la Unión Juvenil) reaccionó así (golpeando a un dirigente del MST en plaza central) porque vio a los rehenes sufrir"; "está en juego la seguridad del país, porque es gente armada, se adecuan perfectamente al terrorismo que se combate en todo el mundo". Estas han sido algunas de las declaraciones de los medios cruceños.
Informaciones de la prensa del país revelan que un contingente de 300 efectivos de la Policía arribó a Los Yuquises y logró tomar el control de manera pacífica. Los policías permanecerán en la zona el tiempo que sea necesario para sentar presencia del Estado y restablecer el orden. Actualmente, hay entre 160 a 200 policías en Yuquises y 100 en Peta Grande. El negociador enviado por el Ministerio de la Presidencia, Roberto Melogno, debe garantizar el orden y la plena seguridad del lugar.
Los rehenes fueron trasladados a Santa Cruz en siete microbuses con escolta policial. Se ha anunciado para hoy la visita de una nueva delegación gubernamental para cuantificar las zonas "tomadas" por el MST, aunque se tienen datos de que se trata de 126 mil hectáreas sembradas con soya, maíz y arroz.
Por su parte el dirigente del MST, Silverio Vera, indicó que este es un conflicto por la posesión de un predio que no tiene dueño, donde el empresario Rafael Paz y su hermano tenían unas 100 mil hectáreas que se sobreponen a la demanda de los Sin Tierra, que pidieron la entrega de 176 mil hectáreas y que luego se redujo a 120 mil. El MST denunció el domingo pasado la quema de sus piñas y el secuestro de tres de sus coterráneos. Se enfrentaron con las personas enviadas por los "terratenientes" de la zona. Hubo dos heridos, uno de ambos lados.
Según testimonios de los propios sicarios, ellos fueron contratados para trabajar en la cosecha de arroz y les iban a pagar 50 bolivianos diarios, pero cuando llegaron al lugar les repartieron armas y la orden de desalojar con violencia a la comunidad. Por otra parte, testigos de la zona afirman, que los latifundistas recurren a la gente pobre de los barrios periféricos de la ciudad, para conformar grupos de choque que actúan con violencia.
El conflicto por la tierra se agudizó, cuando el MST de Santa Cruz, denunció la apropiación indebida de tierras fiscales por parte de terratenientes en el norte cruceño; mientras que el gobierno se había comprometido a dotar estas tierras a familias sin tierra.
Tanto los ocupantes como los empresarios agropecuarios culpan al Gobierno de lo que está sucediendo, y consideran que el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) ha sido incapaz de dar solución a los problemas de tierra, debido a la lentitud en el proceso de saneamiento. En La Paz, el INRA explicó que el saneamiento no ha concluido en la zona, pero dejó en claro que reiniciará su trabajo cuando se retire a la gente del MST.
[Fuente: Adital, Brasil, 13may05]
Este documento ha sido publicado el 16may05 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights |