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09nov15
España dice que en Bolivia falta la práctica de la seguridad jurídica para las inversiones
El gobierno de España a través de su embajador en Bolivia, Ángel Vásquez, destacó las leyes aprobadas en el gobierno del presidente Evo Morales, para generar una imagen de país atractivo a las inversiones extranjeras, pero dijo que aún falta que se ponga en práctica la seguridad jurídica. Calificó además como ásperas y altisonantes las declaraciones del Procurador General del Estado sobre la empresa Abertis.
A menos de 24 horas desde que el procurador Héctor Arce afirmara que Bolivia asumirá su defensa ante el Tribunal Arbitral de París, por la demanda de la empresa española Abertis a la que denunció de haber invertido sólo el 8% de lo comprometido en 17 años, y que gastó 1 millón de dólares en proyectos "fantasmas", la diplomacia española respondió. Después de un acto de saludo protocolar al canciller David Choquehuanca de parte del cuerpo diplomático acreditado en el país, el embajador español Vásquez señaló que empresas españolas fueron las que enfrentaron el mayor impacto de las nacionalizaciones producidas en Bolivia.
"El clima de negocios, la confianza en un país es una cosa que hace falta cultivar, como todas las cosas que tienen que ver con la confianza, no se decreta, no sé decide sólo con las palabras, y en ese sentido el gobierno boliviano está haciendo grandes esfuerzos para ofrecer una imagen en el mundo de país atractivo para inversiones, que tiene sectores económicos interesantes para la inversión extranjera, ha publicado numerosas leyes en ese sentido y lo que hace falta es que la práctica acompañe a la teoría", señaló en el salón Verde de la cancillería.
En ese marco dijo que es bueno que litigios como el de Abertis en contra del Estado boliviano se resuelvan satisfactoriamente y se eviten los conflictos y las palabras altisonantes, en alusión a las declaraciones que realizó el procurador Arce Zaconeta.
"Me pregunta justo hoy que el problema de Abertis ha saltado a la prensa en términos un tanto ásperos. Pero la confianza de ese tipo de cuestiones es algo que se crea con la práctica, no vale sólo decirlo, sino que hay que acompañarlo con gestos y hechos, con una política constante y sostenida en el tiempo que demuestre que las personas y que el gobierno hace esfuerzos, pero hay algo que falta hacer", aseveró.
Vásquez insistió en que toda nacionalización implica una compensación, y lo que el gobierno español siempre dijo es que es legítimo que el gobierno boliviano nacionalice las empresas que desee, pero al mismo tiempo es necesario que las empresas reciban la correspondiente compensación por sus activos nacionalizados. "Y en el análisis que hace el gobierno, es que España reconoce que el gobierno boliviano tiene la potestad y la capacidad para nacionalizar las empresas que estime convenientes, al fin y al cabo es un gobierno soberano. Las empresas están en Bolivia y es una capacidad soberana del Estado boliviano nacionalizar sí cree que por razones de política económica esa es una decisión que le conviene", manifestó.
Acuerdos satisfactorios El diplomático español acreditado en Bolivia destacó que varias nacionalizaciones que contaban con capital español fueron resueltas de manera amigable entre el Estado boliviano y las empresas afectadas, excepto la nacionalización de los Servicios de Aeropuertos de Bolivia (Sabsa) en la que Abertis era la concesionaria de tres aeropuertos de la red troncal.
"Efectivamente, en gran parte se han logrado acuerdos porque la empresa de la red eléctrica española y la empresa Iberdrola que fueron las primeras nacionalizadas, en primer lugar han recibido una compensación por parte del Estado boliviano y ese litigio se cerró amistosamente entre ambas partes -de lo que me alegro mucho- porque eso redunda en beneficio de las relaciones bilaterales y porque es también bueno para la imagen de Bolivia desde el punto de vista empresarial"; sostuvo.
Sin embargo lamentó que el caso de Abertis haya derivado en un litigio internacional, cuando hubo voluntad de la empresa por resolverlo por la vía amistosa. "Sería mejor que no hubieran ido al arbitraje, pero no hay por qué alarmarse, ni estimar que un procedimiento de esa naturaleza es una catástrofe. Los arbitrajes son sistemas jurídicos que se establecen justamente cuando no hay acuerdo entre dos partes", dijo.
En su calidad de embajador de España indicó que representa los intereses del Estado español y de las empresas españolas, y por tanto intentó facilitar una solución entre Abertis y el Estado boliviano. "Presté mi concurso para que se encontrara una solución satisfactoria que finalmente no fue posible, y se acudió al arbitraje. A partir de ahí yo no tengo nada que hacer, ya son los árbitros los que definen", manifestó.
El Estado boliviano asumirá defensa ante el Tribunal Arbitral de París, Francia, entre el 14 y 18 de diciembre, dentro del proceso que le sigue la transnacional Abertis por la nacionalización de los Servicios de Aeropuertos de Bolivia (Sabsa).
[Fuente: Página Siete, La Paz, 09nov15]
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