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22abr10
Informe sobre la visita efectuada a la Unidad 48 del Servicio penitenciario bonaerense.
A los 22 días del mes de Abril de 2010, siendo las 8,30 hs. nos encontramos en la U48 del Servicio penitenciario bonaerense (Prov. de Bs.As.), el Dr. Juan Manuel Casolati de la Secretaría de Ejecución Penal de la Defensoría del partido de General de San Martín, y la Sra. Graciela P. Dubrez, en representación del Observatorio Internacional de Prisiones de Argentina (OIP), a fin de realizar una visita a la mencionada unidad carcelaria. Fuimos recibidos (en un comienzo de la visita, dado que la Sra. Mary Martín por el OIP se sumó una hora más tarde) por el Señor Subdirector de Asistencia y Tratamiento Prefecto Mayor Horacio Ruiz quien junto al Jefe de Penal nos acompaño durante la visita. Al momento de la misma se alojaban 530 internos, contando la unidad con una capacidad para alojar 486, distribuidos en 12 pabellones, un sector de ingresos y el SAC. (Separación área convivencia).
Observaciones sobre infraestructura y suministros básicos
Suministro de agua en la unidad:
En la U48 funcionan dos bombas, con sus respectivas perforaciones individuales y un solo tanque que acumula el agua bombeada de ambas perforaciones.
Con motivo del "Hábeas Corpus" oportunamente formulado ante órganos jurisdiccionales de San Isidro y aún hoy en trámite ante la justicia de San Martín, a los internos allí alojados, como así también al personal que realiza sus actividades laborales en el lugar, el Ministerio de Justicia de la Prov. de Bs.As. provee de un sistema de agua en bidones (8 litros por persona diariamente).
El Sector Talleres recibe y distribuye el agua que la empresa "Hermida Vida" de la Ciudad de la Plata provee a la unidad y el Sector Contaduría recepciona y controla la documentación para la oportuna facturación. Fueron solicitados los remitos de entregas diarias del los bidones para efectuar un control sobre las cantidades de agua que se entrega a los internos. Sin embargo, ello no fue posible, ya que se nos informó que los remitos no se archivan ni en talleres ni en contaduría y que ese control si bien lo realizan en la unidad ante cada descarga de bidones, no se deja constancia en archivos de las entregas y recepciones. De manera tal que sin perjuicio de la información suministrada por el propio personal en cuanto a las cantidades de agua que la empresa descarga diariamente en esa unidad no fue posible cotejar objetivamente dicha circunstancia por carecer de documentación a tal fin; existen múltiples resoluciones ministeriales que indican que todo ingreso y egreso de mercadería (el agua lo es), debe estar avalado por documentación de entrega (remitos), inexistentes en este caso.-
Al recorrer algunos sectores de la unidad (SAC, Pabellón 12 y Pabellón de Ingreso), advertimos que en los distintos calabozos, los internos no disponían del agua que debían tener en cuanto a cantidad y en múltiples casos además de recibir reclamos por la provisión del agua, manifestaban que los bidones eran entregados con tapas sin precintar, algunos estaban directamente abiertos y en todos los casos, se podía observar la existencia en los mismos (bidones) de humedad y gotas de humedad en la parte previa a los picos vertedores, producto del cierre y apertura de las tapas, que son una clara muestra de cuanto al menos de estar en presencia de bidones conteniendo agua rellenada en distintas ocasiones. Se nos informó que la distribución de los bidones es diaria y la realizan distintos internos alojados en el lugar. Pudimos observar que: en algunos casos los bidones son entregados cada tres (3) y cuatro (4) días incumpliendo lo ordenado oportunamente por magistrados y los compromisos asumidos por el propio Ministerio de Justicia de la Prov. de Bs As, en torno a la entrega diaria de 8 litros por persona alojada. Observamos los Libros de Novedades de Ingreso a la unidad, y allí sólo se dejaba constancia del ingreso del proveedor del agua en bidones, pero no se asentaban cantidades de unidades o litros, por lo que fue imposible, verificar a través de documentación respaldatoria la veracidad del ingreso de 800 bidones cada dos días para su distribución en el sector penal, según lo manifestado por el responsable de Área Talleres de de la unidad. Se nos proporcionó copia de un remito de fecha 30/11/09 y de otro remito de fecha 24/11/10 sobre ingresos de bidones de agua, que se los llevó el Dr. Casolati para su informe.
Del libro de novedades surgía el ingreso del proveedor del día 20 de abril del año en curso, sin detallar cantidades ni otro dato relevante, y en talleres y contaduría carecían del respaldo documental del ingreso, circunstancia que es objetivamente irregular y muestra cuanto menos una seria desprolijidad administrativa. Cabe destacar que los internos entrevistados en los calabozos y en forma privada, realizaron reclamos en relación al suministro del agua, señalando además que eran seguidamente amenazados en el caso de hacer reclamos al respecto (serían trasladados del lugar), motivo por el cual, los internos solicitaron reserva de sus nombres, para evitar futuras sanciones.
El Director de la Unidad, señaló que en el mes de marzo solicitó a las autoridades municipales un nuevo informe bacteriológico y físico del agua de ambos pozos, que fue entregado en sobre cerrado a la Jefatura del Servicio penitenciario bonaerense (SPB) desconociendo el resultado de dichos análisis. Resulta inexplicable esta situación toda vez que a 800 metros. Del lugar pasan los caños de agua que proveen de la misma a toda la población del Pdo. De San Martín.
Otra cuestión que señalamos fue la de los cables de electricidad colgando por sobre las rejas del pabellón, con varios parches de cinta aisladora, que los internos usan para proveerse de electricidad para calentar agua y obtener luz. Se nos comentó que se iba a llamar a talleres para que reparara el desperfecto, aunque haciendo la salvedad de que en forma continua los internos arrancan los cables de su instalación y realizan su propio tendido. Conversado el tema con el Sr. Director nos manifestó que era una cárcel nueva pero que en poco tiempo los internos la habían deteriorado. A su vez, nosotros se comentamos que tal vez si se les informara a los detenido que esa práctica era riesgosa para su integridad física, cambiaran de hábito. La respuesta es que ellos viven así. Una evaluación de nuestra institución es que es evidente que los agentes penitenciarios no están preparados para educar sobre los cuidados básicos que las personas debemos observar para nuestra propia integridad. Deslindamos a los agentes de cualquier responsabilidad sobre el tema debido a que esa es una decisión política que los excede, como así mismo sus propios riesgos laborales.
Sanidad:
Al momento de la visita se encontraba en el Sector de Sanidad de la U48, el enfermero de turno Jesús Juan Eralde, quien manifestó que la médica de turno de la fecha, no se encontraba en la unidad pues en horas de la mañana debió acompañar a un interno a la Ciudad de la Plata (hospital especializado) para un estudio importante.
El plantel de médicos de guardia lo constituyen cinco (5) profesionales, no pudiendo cubrir las guardias de fines de semana o en casos como el del día de la fecha, en la que la unidad no cuenta con médico de guardia, debiendo recurrir a los médicos de guardia de unidades 46 o 47. Se encontraba presente además la psicóloga de turno quién manifestó que eran cuatro (4) los profesionales de salud mental que trabajaban allí y que tenían en entrevistas a alrededor de 25 personas cada uno. Que en general los jóvenes eran más proclives a solicitar entrevistas y que luego del motivo puntal que los motivaba, requerían seguir yendo.
Se preguntó sobre la asistencia odontológica y el Sr. Ruiz nos informó que tenían cuatro (4) odontólogos quienes concurrían en horas de la tarde y que no podían mostrarnos el consultorio porque no disponían de la llave. Que los mencionados profesionales realizaban arreglos y extracciones, no prótesis debido a que no disponían de los elementos para ello.
Farmacia general de unidad 48: No pudo ser inspeccionado por no encontrarse el responsable del área, quien tiene en su poder la llave de ingreso al sector.
Farmacia de sanidad de u 48:
Fueron hallados múltiples medicamentos vencidos, algunos de ellos utilizados en casos de importancia, como la adrenalina o sus derivados, broncodilatadores, medicamentos de HIV o medicinas para contrarrestar cuadros de diarreas. En dicho sector se encontró una "CAJA DE PARO", que según el enfermero se usaba en casos específicos (peleas con heridas cortantes y perforaciones graves), conteniendo en su interior, otras ampollas de adrenalina (vencidas en fecha 1/10); fueron hallados también 53 comprimidos de NEVIRAPINA y 20 comprimidos de ZETAVUDIN (vencidos en agosto de 2009), medicamentos que forman parte del cóctel que se utilizan para personas enfermas de HIV.
En la Unidad se alojan cuatro personas con HIV, y analizadas las respectivas historias clínicas, observamos que en ellas faltaban los exámenes de rigor mínimos e imprescindibles para un seguimiento de la enfermedad que por ley nacional corresponden a saber (carga viral, serología y CD4 y CD8) entre otros.
Respecto al hallazgo de medicamentos vencidos se labró un acta, debidamente rubricada. Se apartaron los medicamentos en cuestión y fueron entregados al Subdirector de Asistencia y Tratamiento Sr.Ruíz, a los fines que las propias autoridades estimaran.
Previo al egreso de la unidad, fuimos informados que con respecto a los medicamentos vencidos se había dado inicio a actuaciones administrativas para deslindar responsabilidades. (Se adjunta acta labrada y rubricada).
Cocina:
De acuerdo a lo manifestado por el Sr. Subdirector de Asistencia y Tratamiento Prefecto Mayor Horacio Ruiz, el servicio de comedor está tercerizado (una empresa presta servicio de catering), la elaboración de los menús diarios está a cargo de un empleado de la empresa asistido por varios internos que: según nos ha referido el Sr. Ruiz son seleccionados por la empresa, otorgándoles un pequeño sueldo, no especificando el monto. Al momento de la visita el menú del día consistió en hamburguesas, una tarta de acelga y un puré mixto (en elaboración). Los internos entrevistados no hicieron mayores objeciones sobre la calidad de la comida, aunque se refirieron que a veces les llega fría.
Pabellón 12:
Alojaba 35 personas, con una capacidad para alojar 32; el baño estaba inundado, al igual que el pulmón del pabellón que esta desbordado de agua fétida, basura y restos de comida en un estado casi abandónico.
En algunas celdas se alojaban de a tres internos (celda 3), sin colchón, 4 días sin entregas de bidones de agua, con la instalación eléctrica precaria y peligrosa, mediante la que se calentaba un poco de agua extraída de la canilla de la celda.
SAC (separación área de convivencia):
El ingreso al sector de duchas estaba inundado con agua sucia.
Entrevistamos a internos allí alojados. Celda 7 alojaba dos internos, que carecían de colchones para dormir, lo hacían sobre mantas y bebían agua de la canilla, por carecer de agua de bidón.
En la mayoría de las celdas del Sector Área Separación Convivencia, los internos manifestaron que al ingresar a las mismas se encontraban con la existencia de bidones con agua abiertos y que por seguridad no la bebían; para luego terminar reconociendo que preferían beber el agua de la canilla previa hervida de la misma. Efectivamente en las celdas inspeccionadas pudimos advertir la existencia de estos bidones abiertos, similares a otros bidones que tenían para entregar en el acceso del SAC, los que a simple vista se observaban deteriorados, también sin precintos y humedad en la parte de vertido. La unidad registra 60 ingresos de excediendo el cupo de la unidad, generándose serios inconvenientes (falta de colchones, desborde de cloacas, saturación del suministro eléctrico, aumento de la demanda de atención médica), con el agravante de la escasez de oferta de atención en debida forma. A modo de ejemplo podemos señalar que en la fecha de la visita no se encontraba la médica de guardia, que independientemente del motivo de su ausencia, dejaba en situación de riesgo al resto de la población. Si bien es cierto que pueden contar ante una urgencia con el médico de guardia de la U 46 o 47, lo cierto es que en muchos casos, (ver informes de visitas a U 46 y 47 de año 2009 y 2010), en estas unidades también se dan casos de inasistencias de médicos, con lo que no se encuentra garantizada de modo alguno la atención mínima y básica de los internos del Complejo Penitenciario San Martín. Si a esta circunstancias, sumamos que la medicación que se encuentra en stock está vencida, el cuadro de situación de desmadre sanitaria resulta evidente y sustancial.
CONCLUSIONES: La superpoblación es evidente, gradual y grave (aprox. 45 internos), número que sube de modo exponencial diariamente.
En consecuencia, internos que deben dormir sobre mantas, por falta de colchones, colapso de cloacas (ejemplo pabellón 12) y aumento de problemas ante el abordaje de distinta contingencias (trabajo asistencial, falta de cupos para tareas laborales, imposibilidad de realizar seguimiento de la población conforme a la reglamentación, etc.)
Las deficiencias sanitarias (falta de médico de guardia, medicamentos vencidos, deficiencia de recursos humanos y falta de medicamentos) son notorias y una constante, que pese a las distintas intervenciones, presentaciones y denuncias formuladas no han variado lamentablemente sino que se sostiene en el tiempo.
Buenos Aires
22 abril 2010
Observatorio Internacional de Prisiones de Argentina (OIP)
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