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25ago10

Resumen de la audiencia del 25 de agosto del juicio celebrado en San Rafael por crímenes de la dictadura.

Índice de testimonios:

Testigo: Ángel Ismael Orbelli
Periodista

Yo era corresponsal jefe del Diario Mendoza para el año 75 y estaba a cargo de la radio municipal. Fui director hasta el golpe de Estado. Estuve unos días mas porque estaba encargado de la dirección de la radio no pedía dejar mi cargo por la responsabilidad que eso implica pero le exprese al mayor Suárez que yo comprendía que yo trabajaba para otro gobierno y yo había caído con él. Durante el golpe de Estado fue una época muy dura para la Argentina. Evidentemente que el movimiento de fuerzas militares en ese tiempo era bastante intenso ya que la situación de crispación que tenía el país había enfrentamientos entre fuerzas militares y algunos grupos como ERP y montoneros. La situación era compleja, venía mal y terminó peor. En San Rafael no hubo gente del ERP y montoneros. Lo que pasa que el desplazamiento de algunos dirigentes, una vez me toco hacer una nota porque estaban en San Rafael Aval Medina y Norma Arrostito, pero eran circunstancias que decían que yo lo vi, que no lo vi y yo tenía que confirmar, no pude comprobar si ellos estuvieron. Lo único que recuerdo es que nos llegó a la corresponsalía del diario que habían estado en un restaurant de calle Ballofet, entre vistamos a los dueños y sacamos esa información. A mí no me consta que ellos hayan venido. Si hubieran personajes de ese nivel y quisiera tener una entrevista con un periodista es en reserva, se hace todo un operativo de su gente para cuidar a quien se va a entrevistar. A mí personalmente no me ha tocado, pero por lo que he leído, esa es la situación. En mi función de periodista no tuve posibilidad de manejar información de la existencia de desaparecidos. Cuando se produce el golpe de estado, la gente que se detiene pasa a cargo del PEN. La información la daban las fuerzas armadas, había versiones que detenían a una persona, a otra u a otra. Las fuentes de información estaban muy restringidas. Nosotros por formación profesional, nosotros venimos de una escuela, de la vieja escuela de periodismo, donde lo primero que se nos enseñaba es que nosotros teníamos en nuestras manos lo más importante que tiene una persona que es su honor. No podíamos escribir cualquier cosa y además la aclaración de una noticia no reparaba el daño producido, teníamos que chequear tres fuentes distintas. Era una norma muy estricta en la prensa, se calificaba muy mal la equivocación. Cuando se rompe el orden constitucional y los detenidos empiezan a depender del PEN, en el diario era información importante pero era una parte. Conozco a Ruiz Soppe por mi tarea de periodista, yo siempre conocí a los funcionarios, a el lo conocí como jefe de la URII, le quiero decir que hay otro principio del periodismo y es que el periodismo vale por sus fuentes. Ruíz Soppe estaba a cargo de la policía y de allí teníamos información policial para el diario. Respecto del Dr. Egea lo conocí como abogado y vecino de San Rafael, una, dos o tres veces lo vi en la policía. A Labarta lo conocí en sus funciones de policía, trabajaba para el servicio de inteligencia, teníamos la relación de un periodista y un funcionario. Conocí al mayor Suárez, no solo lo entrevisté, sino que yo manifesté anteriormente que mi renuncia como funcionario municipal se la presenté a él, como “superior”. Era un hombre de una personalidad muy fuerte, no sé si por su uniforme o sus funciones en ese momento, no era un hombre fácil, tal es así que cuando yo le manifiesto lo que correspondía, si bien es cierto que mi tarea era técnica en el municipio, pertenecía a la estructura de un gobierno, tenía que renunciar, aunque al principio me debía quedar por mi función y hacer los trámite para irme. Mi actitud no le gustó pero yo mantuve mi posición, luego la comprendió. Los estudios de la radio municipal estaban en la misma municipalidad, allí tenía la cabina para salir al aire, en la torre. La trasmisión de radio municipal era muy limitada, era de 7 a 14 hs. No estaba al aire todo el día. Yo renuncié unos dios después del golpe. Lo único que se es que presente la renuncia a un sub oficial mayor o principal que hacia allí de secretario del capitán Studelher. La cabina de la radio era una habitación, no recuerdo si tenía baño, sé que tenía el aislante para poder transmitir, era una cuestión arreglado para que funcionara una radio municipal. En honor a la verdad, por la radio hace mucho tiempo que no voy. Studleher estaba en la municipalidad. La dirección de la radio no sé quien la asumió después. Como cualquier organismo del estado había movimiento militar y policial. La primer persona detenida en la municipalidad fue Cesar Massini a cargo de la intendencia. Estuvo uno o dos días retenido en el despacho municipal. A otras personas, por mi profesión, el Dr. Porras. No recuerdo circunstancias. Labarta siempre estuvo de civil. Con respecto a la radio municipal, luego del golpe siguió trasmitiendo en horario de 7 a 14 hs. Uno de los nombres que recuerdo que era periodista de la radio fue Juanjo Martínez. No recuerdo si siguió trabajando después.

Respecto de las bombas que se pusieron en San Rafael, una fue frente al sindicato de la alimentación, en un auto, con certeza no recuerdo, la información era tan amplia, ha pasado tanto tiempo que puntualmente no recuerdo. Susana Sanz de Llorente era una dirigente muy activa, puede ser que le hayan puesto una bomba pero no lo recuerdo.

En mi función de director, yo organizaba las tareas de la radio, a lo mejor en alguna oportunidad puedo haber salido al aire. Para subir al lugar de audición hay una escalera. No es incomprensible que no recuerde a quien le pase la dirección de la radio. Le entregué la renuncia y me fui. El día del golpe se toma el control de las radios y de la televisión, ahí se trasmite la cadena nacional. Llego esa mañana a mi trabajo y la municipalidad ya estaba tomada. Subo a mi trabajo y llega un suboficial y después sube el intendente militar me dice que de acuerdo a la responsabilidad hasta nueva orden, la radio debe seguir funcionando y que hasta que se organice con su nueva gente, y yo por mi responsabilidad como director de la radio me debía quedar unos días. La persona de mas confianza era Cesar Robles que falleció, que era la persona que llevaba operativamente. Norma Sarmiento trabajo conmigo, era periodista. A Mauna lo conozco porque era técnico en LV4. No me acuerdo si trabajo. En la parte técnica estaba Manolo García. Con respecto al mayor Suárez recuerdo que decía que estábamos en un gobierno de reconstrucción nacional para ir contra el terrorismo. No sé si alguien de la radio trabajaba para el Batallón 601. Me enteré después que en la radio había un centro de tortura. En los ochenta se empezó a decir que había torturas en la radio. Edgar Martín Ferreyra es un militar retirado por haber trabajado con él en LV4. Siempre tuvo programas dedicados a folklore. Lo veo en la radio a veces pero no sé a donde vive. A radio municipal se accedía como ahora, por la escalera y sigue otra escalera para arriba. Esta última escalera es un poco mas estrecha. La municipalidad no tiene ascensores. Se le exhiben las fotos de los desaparecidos. No reconoce a nadie. Supe que había detenidos en la departamental. Respecto de otros centros de detención, sé que en las comisarias hay detenidos. Puntualmente con el tema del Dr. Massini, traté de interesarme por su relación con su familia y su padre y madre trataban de buscar información y uno la poca que tenía se la podía transmitir. Supe que Massini estaba en la departamental. Sé que también estuvo el Dr. Porras, otra gente no recuerdo. El sufrimiento de la familia era muy grande. La incertidumbre existía en ese momento, ya que se rompió la constitución y el orden. En San Rafael siempre se guardo buen recuerdo de los militares, aquí funcionó el regimiento 7 de caballería, muchos de los oficiales que venían allí se terminaban casando con muchachas de San Rafael. Las versiones respecto de la tortura en esa época aparecieron después.

Testigo: Juan José Martínez
Periodista

Trabajo como periodista independiente.

Solo conozco a Egea por su profesión.

Para el golpe de estado yo era menor de edad y no trabajaba en la radio. Empecé a trabajar en radio municipal en el año 80. Yo era muy amigo de Cesar Robles, era disc jockey, concurría a la radio esporádicamente en el 76. Iba de 7 a 14 hs. ya que en ese momento había gente en la radio. En la radio no veía militares, pero los había por todos lados. Nunca vi que llevaran personas detenidas a la radio municipal. Había una lista negra de música, era una lista de música que no se podía pasar, indicada por temas, interpretes y autores. Primero los temas debían ser anunciados por la ley vigente y había una lista aparte que ciertos temas no se ponían. No había acceso a esa música. No se podía poner León Gieco, Mercedes Sosa, Los Jaivas. La hermana de César era discotecaria. No recuerdo quien fue el director después de Orbelli. Recuerdo vagamente las instalaciones de la radio. Hay dos escaleras, en el control había unos aparatos valvulares que emitían la señal a la torre. La radio antes transmitía en la plaza. En el control estaban los equipos y la sala de locución que tenía un sistema acústico, una mesa y tres sillas y un micrófono. Estaba prensa al fondo. Se subía por la entrada principal y había una escalerita finita. No recuerdo periodistas que hayan participado del Batallón 601, conozco a Maunas del ambiente, creo que esta en LV4. En los noventa me enteré que Maunas era de inteligencia. Cuando yo trabajé en la radio, año 80, los compañeros eran Norma Sarmiento, Alejandro Rotta que era locutor de la radio. Nunca escuché nada sobre estos hechos. En esa época no participaba en política. En ese momento se accedía por dos escaleras y la segunda escalera era sinuosa, difícil. Antes se accedía directamente a la radio. Había un hall, estaba la sala de locución, estaba dilección y control técnico. La dirección era una sala como esta sala de debate, un poco menos, dividida con biombos que hacían de pasillo. En ese lugar cabía una cama.

Testigo: Omar Rodolfo Luquez
Ordenanza en tribunales

Conozco al Dr. Egea como abogado de San Rafael. A Labarta lo conozco porque trabajaba en investigaciones de la policía. A Guevara y Ruíz Soppe no los conoce.

Trabajo en tribunales desde junio 1975 hasta el 30 de abril de 1976 estaba reemplazando a un señor que pidió un año de licencia. Recuerdo cuando Sergio Chaki fue detenido, yo trabajaba de ordenanza en el archivo. El día de la detención de Chaki estaba la puerta cerrada, había militares, cuando llego al hall, veo a Chaki con las manos en la nuca, dos soldados que lo apuntaban con la carabina en la espalda. A Chaki lo bajaron a los calabozos de la departamental. Recuerdo haber visto al Dr. Douverne, sé que estuvieron detenidos el Dr. Porras, el Dr. Massini. Yo he visto los libros del poder judicial. Respecto de los libros posteriores que faltan, cuando estaba Alfonsín en la presidencia, me dijeron que buscara el libro de guardia y que lo tenían que mandar a Buenos Aires, faltaban todas las hojas del 24 de marzo del 76 hasta el fin del golpe. Ese libro se remitió a Buenos Aires. El señor Vilches era secretario, vive en la calle Day entre Lavalle y Pueyrredón. Puede ser que ese libro haya ido a la CONADEP. El archivo estaba al lado de la sala de debate en la planta baja, al lado de la guardia. Había una entrada. El archivo estaba en el sótano. Respecto del libro que yo recuerdo era un libro como el que me exhiben y me dijeron que busque el libro de la guardia policial y para mí era ese libro. Se lo di a Vilches. La guardia policial esta en la parte que da a la calle interna de tribunales. Supongo que los detenidos los tenían por ahí y después los sacaban por el pasillo. Había una puerta doble donde estaba la sala de secuestros. Le exhiben croquis. Conozco al policía Trentini de vista. Cuando lo llevaban a Chaki vi a un militar y dos soldados apuntandole. Los detenidos por razones políticas estaban en los calabozos. Recuerdo haber visto al Dr. Douverne. Yo podía ver el patio desde la biblioteca, desde la oficina que baja al sótano y de las oficinas del registro. Podía ver el patio de bomberos. No recuerdo haber visto detenidos en ese lugar. Sé que estaban pero no los vi. La gente que trabaja en el registro y los que estaban en el piso alto también los pueden haber visto. La casa departamental estaba bajo control militar. Conmigo trabajaba Gonzalo Fuentes, Edgardo García, Elena Sepúlveda, Silvia García, Gladys Molina. Lo único que recuerdo es que un día que cruzaba la plaza San Martín y encontré a Chaki, dijo que había estado muy mal, que la había pasado muy mal, pero no me conto que le hicieron. El intendente de tribunales era Vilches. Conocí a Elio Rivamar, era ordenanza en ese momento. Pedro González era compañero mio. El juzgado de faltas estaba al comienzo del pasillo y los ventanales de ese juzgado dan al patio de bomberos, desde ahí se podría haber visto a los detenidos.

Testigo: Carlos Alberto Massini
Hijo del intendente, abogado

El 24 de marzo del 76 fue detenido mi padre que estaba a cargo de la municipalidad y en agosto mi hermano. Compartía con el estudio jurídico. Allanaron nuestro estudio y allí fue privado de su libertad. Al momento de la detención de mi padre fue alrededor de las 7 de la mañana del día 24 de marzo, fue a avisarme mi hermano mayor, yo vivía en barrio SAT, mi padre era el intendente, fui al departamento de mi padre y cuando llegue había una comitiva militar y estaba bajando mi papa, lo estaban por trasladar, lo llevaron a la municipalidad donde estuvo dos o tres días y lo tuvieron retenido en la municipalidad. Recuerdo por dichos de mi madre que llegó una comitiva militar media hora antes y que habían dado vuelta el departamento en busca de no se sabe que, que había pasado un mal rato porque no lo dejaron ni vestirse, mi madre no pudo vestirse. Alli lo llevaron, lo acompaño el Dr. Barros hasta la municipalidad. Alli estuvo dos o tres días y recupero la libertad. Cuando el sale me dice que había sido bien tratado. Este señor Studleher había sido respetuoso con él. Entiendo que sabían de quien se trataba. Era una persona muy respetada socialmente. Respecto del allanamiento al estudio jurídico, el estudio se encontraba en el centro de la ciudad, tenía dos plantas, la planta alta estaba toda cubierta por militares, no estaba preparado para eso, me imaginaba que eramos nosotros los destinatarios. Habían ocupado el privado mío y el de él, Habían sacado libros, toda la documentación jurídica y social, hablaban de los libros. Estuvieron un rato allí y fueron primero al privado de mi hermano, fueron al privado mí o. Mi hermano se fue con ellos, yo me quedé, el objetivo era él, quien era objeto de esa persecución. Me quedé, empecé a movilizarme. No recuerdo si había personal policial, pienso que fue el 2 de agosto. No recuerdo quien daba las ordenes. Había alguien en el pasillo. Tengo idea que se llevan algunos libros. Me parece que lo llevan a infantería y después el termina en la casa departamental. Estuvo 14 meses detenido.

El siempre fue muy reservado y no quiso que su familia se enterara, era mas reservado, si me contó que en alguna ocasión en el edificio de tribunales había sido víctima de golpes, me lo habrá contado en una noche de mucha intimidad por que el no era de querer preocupar a su gente, si estoy seguro que fue torturado, el era mas de decir de menos que de mas, el era un político el era un hombre que le brotaba la política, un hombre muy estudioso muy formado políticamente, me atrevo a decir que el peronismo no tuvo un dirigente de la talla de mi hermano, hecho y derecho, sabiendo dimensionar la política, un hombre que hablaba del hombre nuevo, pensemos que la municipalidad no se agota en hacer obras, el fue candidato a intendente, el tenía un grupo que se denominaba de los bancarios, sus compañeros de militancia, Osvaldo Chaca fallecido hace 20 días por decir alguno, eran gente estudiosos, apostaban a aprender lo que Héctor humildemente y a diario les enseñaba, era un hombre de consulta, era un hombre especial, Sergio Chaky estuvo detenido, era un compañero de el que también fue detenido, estuvieron todos en la casa departamental, ellos estaban incomunicados, en alguna ocasión tuve ocasión de verlos en el patio de bomberos y entonces los pude ver a Alfredo Porras, López, Chaky estuvo detenido allí también. Se podía ver la planta baja, entonces uno se enteraba y veía, no reparé en la custodia, no quería comprometer a los empleados, cuando estaba mi hermano allí no pude ir al lugar de detención de mi hermano, solo podía verlo desde tribunales, eran oficinas pequeñas con no grandes comodidades, no recuerdo haber visto autoridades policiales y militares en ese lugar, habíamos creado la asociación de abogados peronistas hicimos gestiones por los detenidos, no teníamos respuesta nos decían que estaban a disposición del PEN y se agotaba allí lo que podíamos hacer, con respecto a las personas desaparecidas si recuerda alguna de esas personas. Hicimos gestiones con la Dra. Pierini, en la Nación. En relación al allanamiento en el estudio jurídico, yo vi personal militar. No recuerdo haber visto personal policial. Conocí al Dr. Egea porque fui asesor policial, yo hacia sumarios, aparte era Massini, yo no hacia nada para estar cerca de nada, estaba cerca de los expedientes. No se exactamente cual era la tarea de Egea, él tenía otra historia, otra jerarquía, era superior. Yo había ingresado por ser peronista. Respecto del allanamiento en el estudio, creo que había un gran equivoco, creían que Héctor Massini era el ideólogo de algún movimiento subversivo, lo iban a buscar a él. No ha faltado alguien que por pequeñez política haya pensado que Héctor Massini era un personaje delesnable y que hubiese sido ideólogo de movimientos subversivos. Se le exhiben fotos de los desaparecidos. No recuerdo ninguno. En el momento del allanamiento, yo llegue un poco mas tarde, Habían desplegado un operativo. Alguno se dirigió especialmente a mí, hizo una especie de pantomima, “mire lo que estamos sacando”, estaban todos con uniforme de fagina. Me acuerdo que llego mi hermano y dijo que eso no era de él, lo que sacaban tampoco era mío. No era un lugar de hacer política. A mi hermano no lo agredieron en la detención, después creo que van a la casa, hacen un allanamiento en la casa de él. En ese momento mi cuñada estaba embarazada y como consecuencia de este allanamiento ella perdió al bebe, debe haber estado embarazada de siete u ocho meses. Luego mi hermano quede incomunicado, no podíamos saber donde estaba, no sabíamos si iba a ser desaparecido, esto siempre lo pensábamos. Hicimos muchas gestiones, conseguimos firmas de gente que no imaginábamos. Hablaban de su hombría de bien. A mi hermano lo llevan a La Plata, creo que lo liberan en Mendoza pero no recuerdo donde lo liberan. Siempre pensamos que podía desaparecer, era un momento donde nadie se jugaba por nadie, donde “por algo sera” no dejaba de ser la frase. Algunos nos dieron su apoyo y otros no. Pienso que por las gestiones hubo alguien que se la jugó por él y por ello salio en libertad. Se le exhiben fotos de los imputados. A Ruíz Soppe lo Conocí antes, no tuve contacto con él, yo me limitaba en la policía a hacer un sumario. En el operativo no recuerdo haber visto a Guevara. No reconoce a ninguno. Respecto del allanamiento en la casa de mi hermano, le dieron vuelta la casa, él tenía muchos libros, era una casa de barrio, una habitación la tenía como lugar de estudio. En esa época cerraban una cuadra y casa a casa eramos víctimas de esta situación. Me parece que mi hermano el primer lugar donde fue es infantería, luego va a la departamental, calculo que habrá estado alli dos o tres meses, después fue a Mendoza, en Boulogne Sur Mer estuvo otro tiempo. Uno de los desaparecidos fue detenido el 26 de agosto, Berón, pero mi hermano no hablaba mucho, no me acuerdo si me comento algo. No me acuerdo con quien estuvo detenido. Con respecto a Roca, Flores, no me suenan. Mi hermano no hablaba. Mi hermano falleció hace dos años, un 24 de julio de 2008. Mi cuñada puede declarar. Ella es Ana María Sueta. Recuerdo un comentario que Chaki fue detenido por unos libros que le dio Héctor Massini y que la razón de su detención era que había escondido esos libros. Respecto de mi trabajo en la policía, yo ingrese en enero de 1975 como oficial principal y me fui en el 77. La asesoría no recuerdo de quien dependía, nunca vi un organigrama formal, uno dependía de quien estaba a cargo de la URII. Yo me instalaba en mi propia oficina que era una oficina general, había 10 o 15 profesionales. Como asesor de la policía podía aspirar a tener un arma. Yo no tuve inconveniente de estar en la policía, no Conocí vinculación entre la policía y el ejercito, yo sentía que cumplía una tarea que tenía que cumplir, necesitaba el trabajo, tenía hijos chicos. Mi trabajo no se vinculaba con la situación familiar, me parecía una especie de reaseguro estar ahí porque mi hermano estaba detenido. Yo no Conocí los fines que tenía el ejercito desde mi lugar de trabajo. Yo no sabía que la policía estaba bajo control del ejercito. El día que detienen a mi hermano y yo lo voy a ver, alli veo a un agente policial que acompañaba al ejercito, pero tampoco eso me indicaba a mi en es momento que podría haber una conexión o una tarea conjunta con el ejercito. Yo desde mi conocimiento vulgar, frente a los golpes de estado anteriores, siempre lo habíamos relacionado con los militares. Yo como abogado iba todos los días a la casa departamental. En algún momento alguien intento amenazarme por estar en asesoría de la policía, ellos sabían que yo cumplía funciones administrativas. Una vez Baez Koltes insinuó que nadie podía formar parte de la repartición si no compartía el criterio. No recuerdo porque Egea se fue de la policía. A Labarta lo conozco de siempre. A él lo conozco de la policía, del deporte, él estaba en informaciones, incluso iba por alli al estudio. No recuerdo vinculación entre el D2 y el ejercito. Ruíz Soppe me pidió la renuncia porque mi hermano estaba detenido y por la militancia de mi familia. Me sentí muy mal, yo vivía de eso. Yo firme la renuncia en ese acto, no daba para discutir, ellos entendían que yo podía ser un factor de perturbación, yo firme. Ruíz Soppe era comisario, creo que él ya había pasado a Mendoza en un cargo de jerarquía. Yo en ese momento no me puse a pensar si dependía directamente de Ruíz Soppe, en ese momento daba para cerrar los ojos y firmar donde fuese. A mi me dijeron que iba a una reunión jurídica y termine en esa reunión en calle Patricias Mendocinas y Montevideo con Ruíz Soppe que me pedía la renuncia. Conocí a Baez Koltes, recuerdo de él una situación circunstancial, no tengo una opinión acabada de él. Conocí a Daniel Huajardo, formaba parte de investigaciones, no lo puedo afirmar, Fierro si trabajaba con Labarta. A Mussere no lo Conocí. Trentini manejaba maquina, era administrativo. No se donde funcionaba el D2. No recuerdo si al personal policial le dieron orden de vestir de verde.

Testigo: Hugo Oscar Acaya

En el año 1976 me desempeñaba en el cuerpo de infantería. Fui destinado a la guardia de la casa departamental, no me acuerdo las fechas. Era reten en la casa departamental, es un agente mas en la guardia policial. Compartía trabajo con dos señores de la cárcel y Raúl Avila. Cumplía horario de 8 a 20 hs. cumplía funciones 24 x 48 hs. Declare en el año 86 en el juzgado federal. Se le exhibe su declaración. Esta mi firma. Trabaje en la casa departamental durante los meses de septiembre, octubre y noviembre de 1976. No había personal militar. Si concurría personal militar. Recuerdo que concurrían muchos militares en la noche. Nosotros estábamos en el subsuelo del tribunal. Los militares pedían el santo y seña, nosotros abríamos, ellos cerraban y nosotros salíamos a la escalera. Nosotros estábamos al cuidado de los detenidos. Nosotros los llevábamos al baño que esta enfrente pasando una escalera y salir del lugar de los calabozos. Por la puerta que da a bomberos sacaban y entraban a los detenidos. En la fecha que estuve Habían varios detenidos, no recuerdo la cantidad que Habían. Los militares eran los que traían la comida. El mayor Suárez y Guevara iban a pedir novedades de los presos (eso dijo en su anterior declaración pero ahora no se acuerda ni quienes son). Respecto de los detenidos me acuerdo de Ibañez, Riera, Bracamonte, Ríos, Barahona. No recuerdo a Berón. Yo podía conversar con los presos, eramos como una familia, pasábamos 24 hs. todos juntos. Nunca vi que los detenidos volvieran en malas condiciones. Yo no sé si sacaban al pasillo. No nos permitían estar cuando los militares ingresaban al lugar. A veces entraban por 15 minutos, a veces por una hora. Cuando ellos se iban a retirar nos golpeaban la puerta y nos dejaban entrar otra vez. Los detenidos eran muy reservados, no hacían comentarios. Yo no se que hacían los militares cuando ingresaban al calabozo. No tengo miedo ni me siento amenazado. No recuerdo al mayor Suárez, me suena el nombre. No recuerdo que militares estaban a cargo. Puedo haberlo dicho antes pero ahora no me acuerdo. Ahora soy cabo, antes era agente. Yo sabía que la policía estaba bajo control operacional de las fuerzas armadas. Yo no obedecía a los militares. Si venía un oficial del ejercito yo tenía que obedecer siempre que dieran el santo y seña. Todos los días cambiaba el santo y seña. Yo a los detenidos los veo siempre. Con la comida llegaba un camión por bomberos, daban el santo y seña y traía la comida (en su declaración del año 1986 dijo el dragoniante Díaz, que siempre venía por la guardia). No recuerdo ahora al dragoniante Díaz. (en su declaración del año 86 dijo que cuando los presos salían y entraban era que el dragoniante Díaz quien le decía que se preparen) ahora no se acuerda. El dragoniante Díaz tiene que haber sido policía. La guardia en el turno mio estaba a cargo de Avila que era dragoniante. (antes dijo que la guardia estaba a cargo del dragoniante Ambrosio Díaz). Conmigo trabajaban otros dos guardiacarceles, no recuerdo quienes eran. Nunca escuché gritos ni ruidos mientras ingresaban los militares. Nunca vi a nadie sacarlos con los ojos vendados. Nunca me comentaron que los han torturado. No se si tengo alguna enfermedad, he ido perdiendo la memoria y la vista con el tiempo. SE PIDE COMPULSA POR FALSO TESTIMONIO.

Testigo: Ciro Isidro Maza
Comisario mayor jubilado de la policía

Conozco a Ruíz Soppe, Egea, Labarta. A Guevara no lo conozco.

El golpe de estado fue el 24 de marzo de 1976. A partir de alli en mi comisaria se recibieron resoluciones provenientes de jefatura de policía trascriptas de presidencia de la República, venían las ordenes del ministerio de guerra, de los militares. La policía estaba bajo control operacional de los militares. Siempre tuvimos jefe militar. Los jefes civiles fueron muy pocos. En Malargüe se designo intendente al comandante de gendarmería y la policía estaba a disposición cuando nos necesitaban. En Malargüe se produjeron detenciones políticas al intendente de ese momento, ese 24 de marzo y otros no los recuerdo. El intendente era el señor Vicente Sapurian. Yo no recuerdo si ese día detuvieron a algún dirigente gremial. Al señor Sapurian lo llevaron a la municipalidad. El señor Barahona es un señor del pueblo. Ese señor era gremialista de la empresa Grasi, fabrica de hierro silicio de Malargüe. Yo lo que me acuerdo del señor Barahona no me acuerdo si en ese momento fue detenido. Nosotros ibamos como acompañantes, como auxiliares de ellos. La gendarmería entro a la casa, nosotros nos quedamos en el patio. Nosotros no recibimos ordenes precisas de gendarmería, estábamos bajo sus ordenes pero a mí no me dieron ordenes. Yo me enteré por los diarios que dicen que fue detenido. Yo fui comisario en Malargüe, no me acuerdo si fue hasta el final del 76 o principios del 77. Me parece que alli ya estaba en la ciudad capital. Fui policía hasta 1982 o 1984. Yo tomé conocimiento que habían desaparecidos por los diarios. No me consta que haya habido grupos de tareas. Gendarmería cumplía ordenes del ejército argentino. Antes de abril de 76 no fui a la casa de Barahona. Cuando fui en abril se presentó el segundo comandante. La información sobre el domicilio de Barahona la podía tener la policía o gendarmería, más teniendo en cuenta que el jefe de Barahona era retirado de gendarmería. En el 76 yo estaba a cargo de la seccional. Cuando se produce el golpe de estado, me parece que había un comisario, que yo no era, ese día fueron a detener al sr. Sapurian. El 28 de abril cuando detienen a Barahona no me acuerdo donde lo llevaron, no sé si lo llevó gendarmería. Recuerdo el operativo, gendarmería entró a la casa, reviso la casa, fueron uno o dos policías mas. De gendarmería eran 4 o 5, yo no sé si gendarmería tenía calabozo. La comisaria tenía calabozos. Yo vestía uniforme. Cuando fue el golpe nos proveyeron uniforme verde a toda la policía de Mendoza, creo que fue un poco antes del golpe. Es similar al uniforme militar. Puede haber sido que Barahona fue trasladado a la seccional, yo no le puedo asegurar. En el año 76 estaba a cargo el colorado Suárez. Ruíz Soppe fue mi jefe, creo que en esa época estaba él. Al Dr. Egea lo conozco porque cuando yo supe que me trasladaban a Mendoza, tenía mi familia y tenía que trasladarla y vine a buscar a ver si podía alquilar una casa en San Rafael y me entere que el Dr. Egea era encargado de una vivienda.

A Labarta lo Conocí porque era deportista. Después me enteré que trabajaba en el D2. Yo nunca lo vi de uniforme. Creo que lo vi de uniforme cuando trabajaba en Pareditas. Por dichos dicen que Mussere era uno de los que acompañaba a Suárez.

[Fuente: Equipo abogados juicio San Rafael, Mendoza, 25ago10]
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