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04abr08
Carlos Rico se defendió en la Justicia Federal y reconoció haber recibido órdenes del D2
El actual subsecretario de Seguridad dijo que en febrero de 1976, un mes antes del golpe militar, acudió con un grupo de Infantería al edificio donde funcionaba el Departamento de Inteligencia, luego de recibir instrucciones para realizar tareas de custodia de detenidos.
El subsecretario de Seguridad, Carlos Rico, reconoció haber cumplido órdenes impuestas por quienes dirigían el Departamento 2 de Inteligencia de Policía de Mendoza (conocido como D2). Lo hizo al responder una de las tantas denuncias que existen en su contra en la Justicia Federal. Particularmente, el descargo que el comisario retirado hizo en el juzgado de Walter Bento tuvo que ver con las acusaciones hechas por el Movimiento Ecuménico de Derechos Humanos sobre su participación en el traslado de presos políticos que él autorizó con su firma.
El funcionario, que decidió intervenir en la causa a pesar de que todavía no sabe si será imputado, dijo que el 26 de febrero de 1976, tanto él como sus compañeros que conformaban un grupo de combate de Infantería, llegaron al Palacio Policial –donde funcionaba el D2- luego de recibir instrucciones expresas del titular de la Jefatura Regional 1, referidas a una solicitud del D2 para realizar tareas de custodia y traslado de detenidos.
Rico presentó un detalle con horarios y movimientos realizados por el grupo del que formaba parte. Lo hizo a partir de la información que obtuvo del libro de novedades de esa dependencia, que contiene algunas de las misiones asignadas a los efectivos.
Para quienes aparecen en la causa como querellantes, la presentación de Rico no hace más que confirmar las declaraciones hechas por Alicia Morales, la testigo que dijo haber reconocido a Rico en el D2 mientras era torturada. E insisten que, por una cuestión lógica, ninguna tortura ni ningún homicidio pudo haber quedado registrado en un libro de novedades.
"Si estuvo en febrero de ese año, también pudo estar en junio, cuando secuestraron a Morales. Está claro que conocía dónde estaba el D2, que estuvo en varias ocasiones allí y qué sabía las cosas que se hacían adentro", aseguró la abogada Viviana Beigel.
En tanto, si bien el juez Bento continúa con la etapa de recolección y producción de pruebas, se espera que en las próximas horas saque alguna resolución al respecto. Y la expectativa está centrada en saber si será consecuente o no con lo dispuesto por la fiscal María Gloria André, quien señaló al juez que, según el análisis hecho por ella, corresponde imputar al actual subsecretario bajo los cargos que el juez crea convenientes.
Si esto ocurre, habrá que ver cómo reacciona la estructura política encabezada por el gobernador Celso Jaque, que ha condicionado la continuidad de Rico en su cargo a los dictámenes judiciales.
[Fuente: Por Jorge Hirschbrand, Mdz on line, Mendoza, 04abr08]
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