14dic10
Juicio a los represores: Un relato sobre el dolor de los familiares
A pedido del Fiscal Dante Vega, declaró en el juicio a los represores, Graciela Morales, hermana de Alicia Morales ex presa política. En un apretado testimonio explicó cómo fueron los años en los que tuvo que hacerse cargo de los hijos de Alicia y ayudar a su padre a buscar a la joven secuestrada.
Cerca de las 10 de la mañana se sentó frente a las autoridades del Tribunal Oral Federal 1, Graciela Edith Morales. Su testimonio había sido solicitado por el Fiscal general Dante Vega, a partir de las declaraciones de Alicia Morales, quien confesó que desde su detención la familia, sobre todo su hermana, tuvo hacerse cargo de la crianza de sus hijos.
Graciela Morales contó que el día de la detención de su hermana, 13 de junio de 1976, ella y sus padres viajaron desde San Rafael y ni bien llegaron al domicilio de Alicia fueron interceptado por militares y llevados al centro de operaciones D2. Luego de casi todo un día se los puso en conocimiento de la situación de Alicia y se les entregó a los niños que habían sido detenidos también en ese centro de operaciones.
Desde ese momento Graciela, que tenía 14 años, acompañó a su padre en la búsqueda de Alicia que sólo había militado en agrupaciones estudiantiles, y que sin embargo permaneció en la cárcel de Devoto, luego de un tormentoso paso por el D2, hasta 1980.
A través de los contactos que tenía su padre, Victo Morales, militar retirado, pudieron tener distintas entrevistas, no obstante la situación no cambió para Alicia ni para ellos que no tuvieron jamás conocimientos certeros de la joven, a esa altura la vida de Graciela había cambiado rotundamente "dejé de ir a la escuela para acompañar ya mi papá y sostener a mi mamá, expresó.
Entre esas entrevistas, Graciela Morales recordó que un alto funcionario de la policía de apellido Gómez Saá le dijo a su padre:" usted tiene que hacer lo que hizo el general Alsogaray, que cuando supo que su hijo era subversivo le dijo a los militares hagan lo que tengan que hacer porque ese ya no es más mi hijo".
También relató que en cierta ocasión, en una dependencia que estaba ubicada en la calle Las Heras, el juez Petra le manifestó a Víctor Morales "déjese de joder con su hija, tenga en cuenta que los miliares se pasan la justicia por el culo, acá no se puede hacer nada".
Graciela manifestó que todos esos años de "peregrinajes" llevaron a la familia a la destrucción y a cada uno de sus integrantes a clausurar a la fuerza el tormento vivido. "Hasta hace poco no hablamos de estos con mi familia, "con mis padres no hablábamos de esto" señaló reiteradas veces en el relato. En tanto, recalcó que a partir del secuestro de su hermana sólo recibieron maltrato y discriminación de parte de la sociedad.
En el reconocimiento de fotografías Graciela Edith Morales pudo distinguir a María Josefina Budigodinelli, una agente de la policía, que fue quién les entregó a los hijos de Alicia en el D2; a Eduardo Germán Cia Villegas, a Carlos Palacios Escobar y a Luis Alberto Rufino como algunos de los policías con los que su padre se entrevistó para ponerse al tanto de la situación de Alicia.
[Fuente: Noticias Mendoza, Mendoza, Arg, 14dic10]
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