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26jul08
Relevan a la cúpula de la delegación Bahía Blanca de la Policía Federal
El Gobierno decidió anoche relevar a la cúpula de la delegación Bahía Blanca de la Policía Federal, de cuyo edificio fugó el sábado a la mañana el ex teniente coronel Julián Corres, un represor acusado de delitos de lesa humanidad
Junto con la decisión del ministro de Justicia y Seguridad, Aníbal Fernández, la Justicia bonaerense allanó anoche el edificio de la Federal en Bahía Blanca y, según fuentes judiciales, habrían quedado detenidos dos agentes federales que, se cree, estuvieron involucrados de alguna manera en la fuga del represor.
Luego de una reunión con la presidenta Cristina Kirchner, los ministros Fernández y Sergio Massa, flamante Jefe de Gabinete, decidieron ofrecer una recompensa de 150 mil pesos a quien brinde informes que permitan recapturar al prófugo de quien, hasta anoche, no se sabía nada.
Según la versión oficial que dio sobre la fuga el comisario Gustavo Scelsi, jefe de la delegación bahiense de la Federal, el oficial ayudante Cristián Alberto Bértoli, que se hizo cargo de la guardia a las seis, advirtió la ausencia de Corres. El inspector Juan Carlos Lastra, que estuvo de guardia hasta las seis, dijo que había acompañado al "Laucha", alias de Corres, a un baño de los fondos de la comisaría, y que había designado como guardia nocturna y custodia general al cabo primero Pablo Alejandro Carbajal, quien fue el último en ver al represor a la una de la madrugada.
Fuentes judiciales dejaron entrever anoche que Carbajal sería uno de los dos agentes federales detenidos por la fuga. Y que en realidad todos los oficiales que dieron su versión del hecho habían sido puestos en disponibilidad.
Pese a los esfuerzos de la Justicia para dar con el paradero del represor, Corres parece haberse esfumado de Bahía Blanca.
Su búsqueda de Corres sigue a cargo de los fiscales Miguel Castaño, del juzgado federal 1 y Hugo Cañón, de la Cámara Federal, pidieron al juez Eduardo Tentoni, que reemplaza por licencia a Alcindo Alvarez Canale, una serie de medidas que permitan su recaptura.
El fiscal cañón encabezó ayer el allanamiento a la delegación de la Federal en Bahía Blanca. horas antes había dicho que la fuga de Corres "un retroceso muy significativo" en los crímenes que se investigan. Corres está sindicado como un torturador en el centro clandestino de detención de la dictadurqa conocido como “La Escuelita”.
Efectivos de la Federal y de la policía provincial rastrillaron las terminales aéreas, de ómnibus y de trenes además de los hoteles de la ciudad sin resultados. También realizan controles de vehículos en los accesos a la ciudad para dar con Corres, de 55 años, tez blanca, delgado y de baja estatura. Gendarmería Nacional y Prefectura colaboran con la tarea en las zonas fronterizas del país. Corres se fugó el sábado pasadas a las 6 de la mañana del edificio de la Policía Federal, a tres cuadras del centro de la ciudad, luego de que pedir permiso para ir al baño. Estaba vestido con un equipo de jogging y su fuga fue detectada recién dos horas después, tras el cambio de guardia. El 6 de junio el juez federal Alcindo Alvarez Canale lo procesó como partícipe necesario de secuestros, torturas, asesinatos y desaparición forzada de un niño nacido en cautiverio.
Este es el caso de Graciela Romero de Metz quien habría dado a luz mientras estaba detenida en el centro de detención La Escuelita, que funcionó en los años 76 y 77 en el Quinto Cuerpo de Ejército. Según el relato de varios testigos, Corres, a quien apodaban Laucha, aplicaba la picana eléctrica a los detenidos. Una de sus víctimas, Patricia Chabat, lo denunció además por abuso sexual. El 26 de junio el juez Alvarez Canale envió a Corres a un penal del Servicio Penitenciario, pero no había cupo y el represor siguió alojado en la delegación bahiense de la Policía Federal, ahora intervenida por la jefatura de la fuerza.
[Fuente: Clarín, Bs As, Arg, 28jul08]
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