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14sep12
Nunca más y para siempre
El juez Jorge Ferro leyó ayer el veredicto del TOF que durante un año juzgó a diecisiete represores del Ejército, la Policía Federal y el Servicio Penitenciario, a quienes encontró culpables de graves delitos de lesa humanidad. Catorce de ellos recibieron condenas de prisión perpetua. Además, dispuso que se investigue la participación de los directivos del diario La Nueva Provincia y del ex capellán Aldo Vara. Finalmente, subrayó que los crímenes abordados en el proceso oral fueron delitos de lesa humanidad y que se perpetraron bajo un genocidio.
Nadie podrá olvidar, en Bahía Blanca y la región, la fecha del miércoles 12 de septiembre de 2012. Pocos minutos después de las 18 horas de ayer, el juez Jorge Ferro tomó el micrófono y leyó el veredicto con que el Tribunal Oral Federal que integra junto a los magistrados José Triputti y Martín Bava cerró el primer juicio bahiense contra represores de la última dictadura cívico militar.
La lectura del histórico fallo se produjo en el Aula Magna de la Universidad Nacional del Sur (UNS), en Avenida Colón 80, donde un retrato de cuerpo entero del general José de San Martín presidía el acto, ubicado a la izquierda de los diecisiete genocidas del Ejército, la Policía Federal y el Servicio Penitenciario.
En el marco de un fallo que por estas horas es considerado ejemplar en todo el país, el TOF interviniente condenó a penas de prisión perpetua al general de brigada retirado Juan Manuel Bayón, a los también retirados coroneles Mario Carlos Antonio Méndez, Jorge Enrique Mansueto Swendsen, Jorge Aníbal Masson, Hugo Carlos Fantoni, Norberto Eduardo Condal y Carlos Alberto Taffarel, a los tenientes coroneles retirados Osvaldo Bernardino Páez, Walter Bartolomé Tejada, y Jorge Horacio Granada, y el mayor retirado Hugo Jorge Delmé.
Idéntica condena recibieron los policías Vicente Antonio Forchetti, Héctor Jorge Abelleira, y Héctor Arturo Goncalves.
Además, el Tribunal condenó al también policía Carlos Contreras a la pena de 18 años de prisión. Para los ex directores de la Unidad Penal 4 de Villa Floresta Héctor Luis Selaya y Reynaldo Miraglia, en tanto, dictó una pena de 17 años y seis meses de prisión.
Luego de leídas las condenas y una vez detallados los delitos por los cuales se dictaban, Ferro indicó que por disposición del Tribunal los genocidas deberán cumplir sus condenas en cárceles comunes. Asimismo, subrayó, los hechos acreditados durante el desarrollo del debate oral revisten el carácter de delitos de lesa humanidad, perpetrados bajo un genocidio y durante la "dictadura cívico militar", en palabras del propio TOF.
Pero eso no fue todo. Por el trigésimo cuarto punto del veredicto, el TOF -que debió ser constituido por jueces de fuera de la ciudad- dispuso que se envíen a los juzgados de primera instancia las publicaciones del diario La Nueva Provincia, cuyo archivo se resisten a allanar los magistrados locales. La medida apunta a investigar las posibles responsabilidades de los directivos de ese matutino en la comisión de delitos de acción pública. El diario, centenario ya, se ocupaba por entonces de narrar como enfrentamientos las masacres cometidas por los represores.
También en virtud de lo oído durante el desarrollo del juicio oral, el TOF dispuso que se abran investigaciones para determinar la posible responsabilidad del ex capellán Aldo Vara en delitos de lesa humanidad.
El único de los represores que reaccionó durante la audiencia, fue Mario Méndez, a quienes durante la dictadura apodaban "el loco de la guerra". Adriana Metz, hija de la pareja conformada por Graciela Romero y Raúl Metz y hermana de un menor apropiado que aún no ha recuperado su identidad, gritó una pregunta: "żdónde está mi hermano?". Méndez se dio vuelta e intentó responderle con insultos. Dos agentes del Servicio Penitenciario lo pusieron rápidamente en su lugar, pero no pudieron evitar que agraviara a la Madre de Plaza de Mayo Nora Cortiñas.
La sentencia fue recibida con aplausos por parte de las personas que colmaron el Aula Magna de la UNS. Tanto los abogados querellantes como los representantes del Ministerio Público se mostraron satisfechos por las decisiones que el TOF plasmó en el veredicto, cuya lectura insumió a Ferro más de dos horas. Afuera, sobre la esquina de Colón y Drago, más de quinientas personas recibieron con alegría las determinaciones.
Antes, desde las 15 horas, el lugar había sido escenario para la presentación de diversos números artísticos. Luego del veredicto, hicieron uso de la palabra distintos referentes del área. Entre ellos, el secretario de Derechos Humanos de la Nación Martín Fresneda y el de la provincia de Buenos Aires Guido Carlotto.
También dirigió sus palabras a los asistentes el ex fiscal Hugo Cañón, quien preside la Comisión Provincial por la Memoria. Los momentos más emotivos de este tramo del acto llegaron cuando tomaron el micrófono la nieta recuperada Victoria Montenegro, Adriana Metz, el secretario general de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) y ex detenido desaparecido Eduardo Hidalgo y Susana Matzkin, hermana de Zulma, una de las víctimas del episodio conocido como "la masacre de la calle Catriel". Las actividades contaron con la organización de la Agrupación HIJOS, la APDH, la Red por la Identidad de Abuelas de Plaza de Mayo, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, el Instituto Cultural de Bahía Blanca, las direcciones de Derechos Humanos y de Juventud de la Municipalidad y la Subsecretaría de Derechos Humanos de la UNS.
En la Plaza del Sol, sobre calle O' Higgins, se había desarrollado durante la tarde otro acto, que incluyó una radio abierta y la participación de Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo- Línea Fundadora, y de la nieta recuperada Victoria Moyano.
[Fuente: El Diario de Bahía, Bahía Blanca, 14sep12]
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