EQUIPO NIZKOR
Información

DERECHOS

24sep11


Amado Boudou disparó contra la "burocracia" del Fondo Monetario


Respondió así al ala ortodoxa del FMI que fogonea las críticas más duras contra el Indec y pide recurrir a estadísticas privadas. El ministro evitó polemizar con la titular, Cristine Lagarde, y dijo que espera que ella reforme el organismo.

Amado Boudou aterrizó ayer de madrugada en Washington DC. Lo aguardaba una leve llovizna, una agenda apretada y una polémica: un informe del FMI difundido esta semana sugería que el organismo recurriría a estadísticas privadas para confeccionar sus diagnósticos, por desconfianza en los números del Indec.

En una conferencia previa a la apertura de la asamblea anual conjunta del Fondo y el Banco Mundial, la directora gerente de la entidad, Christine Lagarde, ratificó esas intenciones, aunque buscó minimizar el hecho enfatizando su intención de seguir dialogando con la Argentina sobre ese y otros asuntos. La respuesta de Boudou a esas ondulaciones fue tan contundente como cordial: "Nosotros tenemos mucha expectativa de que Christine Lagarde lleve adelante reformas, tal cual lo señaló. En cambio, vemos en la burocracia del FMI otra película, que mira para otro lado, de un juego de niños ricos en un mundo que necesita respuestas rápidas y concretas." En la misma declaración, el ministro recordó que esta misma semana un equipo del Indec viajó a Washington para seguir ultimando detalles sobre la creación de un nuevo Índice Nacional de Precios, y concluyó: "Mirar hoy las estadísticas argentinas se parece mucho a que el capitán del Titanic vaya a ver cómo suena el violín de la orquesta."

Las expresiones del ministro apuntaron al corazón de una interna que desde hace tiempo presiona sobre la cúpula del FMI. Lagarde, de característica más política, cree que el desprestigio del organismo que preside sólo se revertirá si modifica la lógica de la imposición por la del consenso. La segunda línea del Fondo, copado por cuadros técnicos, son ortodoxos en todo: en las ideas y en los métodos.

El equipo económico argentino sospecha que fueron esos cuadros quienes filtraron la crítica a las estadísticas con forma de advertencia en el informe de la discordia. Por eso, Boudou dejó a salvo a Lagarde y cargó contra el staff del FMI. El ministro realizó esas declaraciones sobre el mediodía, justo cuando uno de los destinatarios tácitos de su crítica iniciaba un conferencia de prensa en otro punto de la ciudad.

Nicolás Eyzaguirre dirige el departamento del Hemisfercio Occidental del FMI. Es un referente de lo que en el organismo se conoce como "vieja guardia", en referencia a los técnicos que dominaron la era más dura del fondo, antes del arribo del "reformista" Dominique Strauss-Kahn. Por cierto, las palomas y los halcones del Fondo tienen más puntos en común que disidencias: unos y otros coinciden en que su actividad es proteger al sistema financiero, son fanáticos de la estabilidad fiscal y, sobre todo, acuerdan en que el ajuste es la única receta posible. La diferencia es, sobre todo, de estilos.

En su conferencia, Eyzaguirre confirmó que el organismo podrá utilizar distintas estadísticas -públicas y privadas- para emitir sus diagnósticos, pero buscó de todos los modos posibles profundizar sobre el tema para evitar nuevos chispazos con la Argentina (ver aparte). Los halcones, al parecer, aceptan que en el caso argentino se aplique la línea dialoguista de Lagarde.

El ministro Boudou replicó al FMI al término de un encuentro con empresarios organizado por el Consejo de las Américas. El encuentro se realizó en el Hotel Madison y reunió a casi un centenar de inversores de la economía real. La mayoría de las preguntas pivoteaban sobre dos tópicos: establecer un diagnóstico preciso de las finanzas argentinas y semblantear rubros de inversión. Sobre el primer tópico, el ministro detalló los indicadores de ocho años ininterrumpidos de crecimiento, entre ellos el control de la política monetaria, la robustez de los bancos y el superávit fiscal. "Todo eso -indicó- hace hoy al país más previsible, en medio de un mundo que no se sabe cuál es su rumbo." La invitación de Boudou tuvo como respuesta una fluida demanda de precisiones sobre el panorama minero y petrolero de la Argentina.

Los hombres de negocios quisieron saber en qué estaba el posible acuerdo con el Club de París. "De las consecuencias del default, es el punto más importante por resolver", dijo Boudou, y agregó: "Nosotros esperamos que la negociación le sirva a la Argentina y a la contraparte, en términos de intercambio. Quedó demostrado con la reestructuración de la deuda que cuando se pactan condiciones vinculadas con las sustentabilidad del país es más fácil para todos." Sobre los instrumentos que se podrían utilizar para zanjar el acuerdo, el ministro mencionó a "los Cupones atados al PBI, que surgieron con el canje de 2005. Al principio no fue muy valorado, pero hoy es una herramienta muy interesante para los acreedores." Luego, le consultaron si al eventual acuerdo con el Club de París le seguirá el regreso a los mercados de capitales. "Tenemos sentimientos encontrados con los mercados", dijo Boudou, que aprovechó la circunstancia para criticar a las calificadoras: "Por un lado tuvimos la fuerte tarea de terminar con el horroroso default que recibió este gobierno, pero por otro, cuando uno mira el riesgo país y se da cuenta que no tiene que ver con la capacidad de repago que la Argentina tiene hoy, ve que las calificadoras ponen por encima juicios políticos sobre las condiciones económicas."

[Fuente: Tiempo Argentino, Bs As, 24sep11]

Donaciones Donaciones Radio Nizkor

Informes sobre DESC
small logoThis document has been published on 27Sep11 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes.