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28sep06


Ponen bajo sospecha a 400 policías bonaerenses ex agentes de inteligencia


El gobierno de la provincia de Buenos Aires analiza desde ayer un listado con más de 400 nombres de policías y ex policías que fueron citados en los juicios por la verdad con la esperanza de que sirvan para develar la misteriosa desaparición de Jorge Julio López, testigo clave en el juicio que hace diez días terminó con la condena del ex jefe de inteligencia de la policía bonaerense Miguel Etchecolatz.

Se busca discriminar la situación de revista de cada uno y saber a qué se dedican actualmente los que ya no están ligados a la fuerza. En el primer caso podría decidirse su pase a retiro; en el segundo, se intenta delimitar si existe alguna vinculación entre éstos y la desaparición de López.

La lista, proporcionada a las autoridades del Ministerio de Seguridad bonaerense por la Comisión Provincial por la Memoria, incluye la dotación completa de oficiales y suboficiales que revistaron en la Dirección de Inteligencia de la Policía de la provincia de Buenos Aires (Dippba) entre 1976 y 1983. La Dippba fue conducida por Miguel Etchecolatz durante tres años, entre 1976 y 1979.

Investigación especial.

Además, las autoridades pusieron la lupa sobre los nombres citados por López durante el juicio en el que Etchecolatz fue condenado.

En esa instancia López declaró que fue secuestrado en octubre de 1976 y llevado al Pozo de Arana por una "patota" que integraban, entre otros, Etchecolatz y su chofer, Hugo Guallama, a quien reconoció en una fotografía que le exhibieron los jueces.

Además, el testigo mencionó a Jorge Ponce, Garachico, Aguiar, Urcola, "Manopla" Gómez, "El Rudi" Calvo, Peralta, Recalde, Ballesteros, Vides, Trota y Basualdo y al cabo Tránsito Gigena -"Capitán Cucaracha"-. Y citó a un militar de apellido Galeano.

Con todo este material se realizarán cruces de información con los que se persigue reunir elementos para orientar la pesquisa, que por el momento no tiene un norte definido, según reconocen los propios investigadores. Ayer, los rastrillajes realizados en Los Hornos y en la zona ribereña de Berisso y Magdalena volvieron a dar resultados negativos.

Anteayer, el gobernador Felipe Solá había hecho pública su presunción de que sectores de la policía estuvieran involucrados en una eventual desaparición: "Si López fue secuestrado hay que pensar en quiénes se perjudicarían", había expresado. En rigor, fueron los organismos defensores de derechos humanos los que pidieron a Solá durante el fin de semana que siguiera la pista policial y que investigara a los policías separados.

El cotejo de los legajos de los uniformados, bajo la estricta supervisión del ministro León Arslanian y del subsecretario de Seguridad, Martín Arias Duval, se realiza en un total hermetismo.

No obstante, LA NACION pudo saber que desde la cartera de Seguridad provincial también se busca, mediante tareas de inteligencia, reforzar seguimientos a efectivos que ya no están en actividad pero tuvieron participación durante la última dictadura militar. Una fuente del ministerio conducido por Arslanian explicó que "es habitual que se hagan esas tareas con los más de 2000 desplazados que ya suma esta gestión, y especialmente con los hombres que ahora fueron pasados a retiro".

[Fuente: Pablo Morosi, La Nación, Bs As, Arg, 28sep06]

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